Llegaba la Jornada 4 al Pirata Fuente, donde Veracruz, urgido de por fin poder sumar de a tres en el torneo, recibía a unos Xolos que arribaban tras caer en casa contra Santos, por lo que ambos equipo se perfilaban a buscar un funcionamiento ofensivo. Con el nuevo horario de las 21:30 para Veracruz, se esperaba un lleno desde el inicio, cosa que no sucedió aunque la entrada iría mejorando. Así, arrancaba el partido.

Veracruz arrancaba muy propositivo, atacando mucho por las bandas, aunque el peligro terminaría por llegar desde el centro, cuando Daniel Villalva encaró a Vilar para ser derribado por Leiton Jiménez, quien sería expulsado al provocar penal. Tras sendos reclamos fronterizos, Gabriel Peñalba ejecutó fuerte al centro para adelantar a Veracruz al minuto nueve. Con el hombre de más, Veracruz aprovechó para consolidad su juego, dominando por completo el partido, lo que se reflejaría al 27', cuando tras una buena combinación, Juan Albín disparó sutil en los linderos del área para el 2-0 ante el clamoreo de la afición.

Pero Tijuana, con poco, haría valer su punch en el 32', cuando Dayro Moreno descargó por banda izquierda con Juninho, quien totalmente solo disparó abajo para batir a Melitón y acercar a los fronterizo. La noche se pondría aún más sombría para los escualos, quienes fallaban en la marca pagándolo al 37', cuando Juninho se combinó con Henry Martín para que el mexicano disparara fuerte en el área grande, empatando el partido ante la incredulidad del público. Con el empate, Xolos se animó y metió en su campo a Veracruz, así llegaba el medio tiempo.

Para la segunda mitad, Carlos Reinoso movía sus fichas haciendo ingresar a Enrique Esqueda, quien debutaba con la playera escuala. Sin embargo, lejos de mejorar al frente, el equipo escualo cayó en cuanto a ideas, limtándose a arribar de forma muy atrabanaca; por su parte, Xolos mantenía su postura de esperar al fondo y explotar su velocidad a la contra. Como resultado, el partido se trababa en medio campo.

Y así se escurría todo el segundo tiempo, sin que Veracruz inquietara realmente a unos Xolos que, muy bien parados en el fondo, resistían e incluso se atrevían a pisar el área con ciertas unidades. Los Tiburones recargaron sobre el final, pero el tiempo no alcanzó y el partido finalizó. Así, Veracruz continúa sin conocer el triunfo en el Clausura 2016, en algo que ya preocupa a su afición. Por su parte, los de Herrera sacan un valioso punto de visita, que sabe bien sobre todo por la adversidad enfrentada.