Con rostro claramente desncajado por la derrota ante Chivas y la renuncia de Pablo Marini, los jugadores de Veracruz mostraron su solidaridad con el argentino, asumiendo su parte de culpa y entendiendo el sentir de la afición.

Uno de los que habló fue Gabriel Peñalba, quien mostró su molestia por la situación: "Perdón por la palabra, pero es una mierda (la situación), son momentos que a nadie le gusta pasar, más que nada teniendo un cuerpo técnico como el de Marini que la verdad es de 10 puntos en todo sentido. El fútbol es de resultados y obviamente no van a echar a 30 jugadores; los que estamos dentro debemos ser autocríticos y saber que las cosas han estado bien".

'El Mago' continuó ahondando en el tema de los jugadores, asumiendo la responsabilidad del torneo: "Yo estoy convencido que los responsables de lo que sucede en el campo son los jugadores. Con Pablo hablamos bastante nosotros le brindamos nuestro apoyo así como se lo brindó el presidente. Ya hacía varias fechas que la gente pedía la renuncia de Pablo y los dueños mantuvieron su idea".

Sobre Pablo Marini, Peñalba reconoció su trabajo, pero lamentó que los resultados no se estuvieran dando: "No sólo pasa por ponerse un traje, salir a la cancha y dar tres o cuatro indicaciones, aquí se entrena todos los días y la verdad que el equipo de trabajo de Pablo es formidable; a mí en mi carrera me han tocado entrenadores que no sabían absolutamente nada, pero tenían resultados; son cuestiones que suelen suceder. Los culpables somos los jugadores".

Por último, criticó a la gente que piensa que a los jugadores no les duele la situación, recordando que el fútbol es su vida: "Uno entiende a los hinchas, pero hay algo que está claro: a mí nadie me va a decir que no me duele esta situación. Es fácil mediante una red social, uno no sabe con quién dialoga, es muy simple que por ahí tiren "Fuera Marini", "Los jugadores no sirven", pero nosotros somos quienes lo sufrimos; yo vivo para el fútbol, las 24 horas pienso en el fútbol, si me va bien dentro del campo, mi vida cotidiana me va bien; si en el fútbol no me va bien, mi vida cotidiana no es lo mismo".