Cada vez que un equipo abre su chequera para contratar un nuevo jugador, existe el riesgo de que dicha inversión no llegue a dar el resultado. Detalles como la química y el entendimiento entre nuevos compañeros son trascendentales en la adaptación de jugadores que arriban a un ambiente desconocido. Es por ello que los Xolos de Tijuana mantuvieron sus dedos cruzados en la renovación de su ofensiva, tras prescindir de su goleador histórico en Primera División y reconstruir con la contratación de tres jugadores de cualidades ofensivas.

Grata ha sido la sorpresa para el cuerpo técnico de Daniel Guzmán al ver como su ya denominado "tridente" ha arrancado el Clausura 2015 de manera casi perfecta, con una fluidez que esconde el hecho de que ninguno de estos tres elementos habían jugado juntos en un mismo equipo. Compartiendo previamente nada más que su identidad sudamericana, la asociación entre Dayro Moreno, Gabriel Hauche y Ricardo Da Silva ha tomado de golpe al futbol mexicano tras sólo 5 jornadas, al tener la mejor ofensiva de la liga con 10 goles, de los cuales 8 han anotado.

El fénix colombiano

Llegó como el flamante refuerzo de un club que acaba de conseguir el ascenso a primera división para después irse por la puerta trasera sin pena ni gloria. Hoy en día, tanto Dayro Moreno como la afición de Tijuana se han reconciliado tras el buen arranque de temporada en el que el colombiano ha figurado como uno de los principales responsables.

Bendecido con un talento natural en sus botines, ha demostrado con goles su letalidad en el ataque de cualquier playera que ha defendido en el pasado. Un delantero que cuenta con la fortaleza física para aguantar a los zagueros rivales, la movilidad para presionar al rival ante la búsqueda de posesión, el talento para ayudar en la creación de juego y una voz dentro del campo que siempre exige el balón para orquestar el ataque.

Tomando la batuta dejada por Darío Benedetto, Dayro se convierte nuevamente en el referente en la ofensiva de Xolos, misma responsabilidad con la cual había llegado originalmente al club y que esperará poder cumplir cabalmente en esta nueva aventura.


El demonio argentino

Al igual que el ya mencionado Dayro Moreno, llegó como la contratación estelar al club fronterizo para aportar de su picardía a la causa ofensiva de Xolos. Un desconocido en el futbol mexicano, Gabriel Hauche cuenta con una lista de víctimas que podrán atestiguar de su maldad en los arcos rivales.

Nacido en la ciudad de Buenos Aires, Hauche se ha caracterizado a lo largo de su carrera por su labor de sacrificio a pesar de ser delantero, demostrando su versatilidad de jugar como volante con la misma efectividad. Su velocidad y dribbling le permiten encarar al rival con confianza, lo cual lo convierte en un elemento desequilibrante para Tijuana, siendo quizás su única carencia su definición y toque asistidor en comparación.

A pesar de haber vestido la histórica y sagrada playera albiceleste en el pasado, la carrera del ‘Demonio’ no ha dado el estirón que se esperaba, con algunos en Argentina asegurando que no ha podido explotar el potencial que prometía. Sin embargo, su inicio en Xolos bien podría ser el resurgimiento para un delantero que, incluso siendo banca, fue decisivo y determinante en el título obtenido por Racing el torneo pasado en Argentina.

El trotamundos brasileño

Habiendo pasado por 11 equipos diferentes en 4 países distintos durante sus 9 años como profesional, experiencia es lo último que le hace falta al delantero nacido en Campinas, Brasil.

A sus 29 años de edad, Ricardo Jesús Da Silva ha vivido una carrera particular que lo ha llevado a practicar su talento en distintos estilos de juego que ha sabido incorporar a su propio arsenal durante sus estancias en clubes de su país natal, Rusia, Grecia y, recientemente, México.

Sin embargo, la experiencia no le ha bastado al atacante Paulista para encontrar la consolidación en sus anteriores equipos. Aún es temprano, pero con el conjunto fronterizo Da Silva ha logrado tener un arranque excelso y prometedor en la punta del ataque rojinegro; destacándose por su capacidad para retener el balón y alargar las jugadas junto con una visión que ha sorprendido con asistencias de gol de larga distancia.