Para los integrantes de Haas F1 Team las cosas no salieron exactamente como estaban planeadas en el GP de Canadá. El frío que se sintió durante todo el fin de semana y el excesivo desgaste de los neumáticos, les complicó una carrera que prometía para más.

La falta de temperatura en los neumáticos del VF-16 durante la carrera era evidente, en repetidas ocasiones se vio a los dos pilotos de la escudería americana intentado calentar las llantas mientras recorrían el trazado de Montreal.

Esteban Gutiérrez y Romain Grosjean partían de las posiciones 13 y 14, respectivamente, y fueron esas mismas en las que cruzaron la línea de meta al finalizarse el séptimo Gran Premio de Fórmula 1 de la temporada 2016. Sin embargo para ninguno de ellos fue fácil completar las 70 vueltas, en el caso del mexicano, la constante falta de agarre es algo que deben analizar a detalle para evitar que se repita en el futuro: “No fue una carrera fácil. Estuve luchando mucho para lograr que los neumáticos trabajaran bien y después al final de cada tanda era muy difícil mantenerlos en temperatura y una vez que empezabas a perderla, el coche empezaba a patinarse como si estuvieras manejando en hielo. Este fin de semana sabíamos que iba a saber duro con el clima frio, pero ahora necesitamos analizar como podemos compensarlo y tratar de poner más énfasis en las llantas para hacer que trabajen mejor y nos den una carrera más fácil”, señaló el piloto con el número 21.

Si a estos puntos le sumamos un poco de fiebre, resfriado y dolor de estomago, entenderemos el porqué ésta ha sido una carrera bastante difícil para Esteban Gutiérrez: “No lo disfrute mucho ya que no me siento muy bien, pero el fin de semana ya se terminó y ya estoy pensando en Baku, apuntó.

Por su parte, Grosjean también enfrentó problemas extras que le impidieron concluir en una mejor posición. Fue necesario que el francés hiciera una visita no programada a los boxes para que le cambiaran el alerón delantero, lo que le hizo perder mucho tiempo cuando ya se encontraba cerca del top ten: ”No estamos lejos de los puntos. Llegue a estar en la P11 o por ahí, así que trate de pelear duro y hacer todo lo que pude, pero después el alerón delantero se fue. Esa tercera parada en pits definitivamente nos costó todo por lo que habíamos estado trabajando. Necesitamos ver más a profundidad ese punto para dejarlo resuelto. Hay otras muchas áreas en las que podemos mejorar pero, por lo general, mientras más cosas hacemos, más entendemos el coche y mejor salen las cosas. Volar a Canadá y no sumar ningún punto es difícil, pero estoy seguro de que la próxima carrera será otro paso y mientras más aprendamos, mejor estaremos después”, explicó Romain.

El lado optimista es que la fiabilidad del VF-16 cada vez es mayor y eso da confianza a que pronto llegará la carrera en que ambos coches terminen entre los diez primeros, llevando a casa los ansiados puntos. Por el momento deberán prepararse para enfrentar este fin de semana, del 17 al 19 de julio, el trazado de Baku en Azerbayan, donde por primera vez correrán los monoplazas de F1 al celebrarse el GP de Europa.