Llegaba la esperada cita para el Herbalife Gran Canaria esta temporada. La Copa del Rey se jugaba en casa 25 años después y el colosal Gran Canaria Arena se vistió de gala para el partido del anfitrión. Gradas abarrotadas teñidas de amarillo y un ruido ensordecedor para hacer notar que la marea amarilla también quería ser parte importante del partido.

De la intensidad en la grada se pasó a la intensidad en el parqué, donde ambos conjuntos iniciaban el encuentro algo acelerados y sin demasiado acierto, especialmente el cuadro local, probablemente fruto de los nervios iniciales ante la que sabían que era su gran cita. El más perjudicado de esta sobre excitación inicial fue Ian O’Leary, quien tuvo que ser sustituido a los tres minutos al cometer su segunda falta personal, lo que propició a su vez la vuelta de Brad Newley a la cancha tras superar sus problemas en el tobillo.

En medio de la intensidad y el ruido ambiental, Herbalife Gran Canaria se encomendó a Kyle Kuric, quien anotaba sus dos primeros triples para irse hasta los ocho puntos a falta de tres minutos para dar la primera leve renta a los amarillos (12-7). FIATC Joventut contraatacó también desde la línea de tres puntos, pero la entrada de DaJuan Summers, en la breve pero mejor versión del norteamericano desde que llegó al club claretiano, devolvió la renta al cuadro de Aíto para cerrar el primer cuarto en 16-11.

Joventut intenta romper el partido

En el segundo cuarto Joventut se recuperó gracias a un parcial de 5-16 y logró tomar la delantera en el marcador al ecuador del segundo periodo, donde destacaba la aportación de sus dos bases Hannah y Mallet (21-27). Aíto paró el partido, pero Mallet seguía anotando con facilidad y aumentando la ventaja visitante. Entonces salió al rescate Eulis Báez, el único capaz de encontrar la canasta verdinegra tras el atasco por el que había atravesado el conjunto amarillo en el segundo periodo. No obstante, Sergi Vidal, quien avisaba de que quería ser importante, cortó la reacción local con un triple para llegar al descanso con ventaja para los de Maldonado (28-34).

El Joventut superaba por un amplio 12-23 al Gran Canaria en un segundo cuarto marcado por la mano de Salva Maldonado y la experiencia de los jugadores verdinegros. La circulación de balón fue siempre muy fluida y las decisiones eran casi siempre las correctas, aunque la defensa amarilla tampoco permitía a los catalanes escaparse en el marcador. Los de Aíto se atascaban ante la activa e intensa defensa del Joventut y muchas posesiones acababan en lanzamientos muy forzados de Oliver o Kuric al límite de la posesión.

Reacción amarilla

Con más trabajo que brillantez se fue acercando poco a poco Herbalife Gran Canaria tras el descanso, que logró cerrar su canasta pero le costaba un mundo sumar en la del Joventut, por lo que las ventajas se mantenían cortas, alternando iniciativa en el marcador ambos equipos. Kuric y Mallet tomaban la responsabilidad en el lanzamiento y comenzaron a desperezarse los ataques (44-41) con tres minutos por jugarse del tercer cuarto. Levon Kendall hacía impenetrable la zona y Kuric no paraba de martillear el aro verdinegro para aumentar la ventaja amarilla. Entonces, Maldonado pidió tiempo muerto y las defensas se intensificaron, acudiendo entonces ambos equipos prácticamente a cada jugada a la línea de tiros libres. Con ese intercambio de puntos quedaba el marcador abierto para el último periodo (53-48).

El comienzo del último cuarto sería un huracán de color verdinegro con el nombre de Sergi Vidal. El veterano escolta lideró un parcial de 0-8 para remontar el partido y enfriar poco a poco un pabellón que comenzaba a enmudecer. Aíto tuvo que devolver a los titulares a pista para frenar el vendaval verdinegro y volver a equilibrar el partido, aunque Joventut continuaba sumando de tres en tres.

Vidal sentencia

Entonces llegaron los momentos calientes del partido. Tomás Bellas, que tuvo una noche aciaga, anotaba por fin de tres, pero Kirksay y Suárez respondían para mantener con ventaja en el marcador a la Penya a falta de tres minutos (62-65). Sitapha Savané se hacía notar en defensa y volvía a atascar el ataque amarillo, claro que cada vez quedaba menos tiempo de reacción para el Herbalife. Vidal y Hannah ponían al Joventut con seis puntos de ventaja a falta de 90 segundos y Aíto paró el partido para tratar de consumar una remontada a la desesperada. Anotó Oliver para creer en el milagro, pero Vidal se colgó del aro segundos después para poner la guinda a su estelar partido y sellar el pase a semifinales por apretado 67-74. El Joventut vuelve a una semifinal de Copa del Rey imponiéndose al anfitrión y dejando helado un pabellón abarrotado.