La dulce espera no claudicó más allá de la tercera jornada para el Club Deportivo Vitoria. El equipo filial de la Sociedad Deportiva Eibar, dejó atrás sus dos últimas producciones sin victorias en su temporada estreno al frente de la Segunda División "B". El equipo comandado por Igor Gordobil había igualado ante Tudelano (1-1) y terminó sin puntos frente al Logroñés (3-1). Pero la insistencia a pesar de la adversidad trajo su premio para el equipo vasco que superó este sábado 1-0 a la Real Sociedad "B", un viejo conocido que venía de una victoria (Izarra, 0-3) y goleada en contra en el derbi (Bilbao Athletic, 0-3).
Dos alternativas por bando
Respecto del partido precedente, Gordobil dispuso de dos sustituciones en el inicial: Alfonso Martín Castillo y Asier Etxaburu, reemplazaron a Imanol Sarriegi y Alain Ribeiro. De su parte, el Sanse, entrenador por Imanol Alguacil efectuó dos sustituciones: Ander Gorostidi y Eneko Jauregi, en lugar de Oier Calvillo e Iker Olaizola. Asimismo el partido se celebró en el Estadio municipal de Olarnabe (Vitoria-Gasteiz), arbitrado por César Soto Grado (Comité Territorial Riojano). Este último estuvo acompañado por Carlos Álvarez Fernández y Diego Acero Pradera, del mismo colegio.
El partido entre vitorianos y donostiarras contó con guión de película enigmática, careciendo de oportunidades en las áreas de Cebriá y Zubiaurre. Mediante un planteamiento táctico intenso, los anfitriones buscaban cerrar los circuitos de circulación del Sanse, a quienes desplazaron en su fútbol hacia los costados. Pese a ello, el visitante se las ingenió para aproximarse a la portería rojiblanca. Fue mediante su delantero más destacado, Marquelanz que remataba a puerta con su pie derecho y Cebriá echaba el cuero a córner en el 33 de partido. En tanto del bando local, Fran Pastor, lo intentó ante Zubiaurre pero el cancerbero realista contuvo el balón.
Factor clave: la estrategia
En la segunda etapa el cotejo contó con el mismo prólogo de antemano. Ambos representativos pugnaban en el mediocampo con el objetivo de hacerse con el esférico, aunque los pórticos se mantenían inexorables. Pero llegado el primer cuarto de la complementaria tras una falta en la cercanía del área, Obieta controlaba el cuero para adentrarse al área y disparar aunque en plena carrera fue derribado por Ugarte. El juez principal dictaminó la pena máxima y Fran Pastor desde los once metros estableció mediante un potente remate el 1-0 para el Vitoria.
Más tarde, hacia el minuto 75, Etxaburu tuvo el segundo en sus botas pero la resolución fue deficiente. Durante la reanudación tras el gol, los rojiblancos a base de posesión materializaban la tenencia en insinuaciones sin peligro. De su parte la Real Sociedad "B" se acercó a la valla de Cebriá careciendo de oportunidades para igualar. Con el marcador a su favor, el Vitoria mantuvo la diferencia en su merced y en consecuencia cosechó el triunfo, el primero en la temporada y en la categoría.
Un triunfo que trae perspectivas de aire fresco para el filial del Eibar de cara a lo que viene y muecas de inquietud para el txuri-urdin, siendo la segunda caída de forma consecutiva. En la próxima jornada, ambos conjuntos tendrán la oportunidad de extender su racha, el Vitoria, cuando visite al Real Unión de Irún. Mientras tanto, los donostiarras, contarán con un encuentro para dejar atrás la incertidumbre y conseguir su segundo triunfo liguero ante su siguiente escollo: Barakaldo en Zubieta.