Fútbol. Ya está aquí, ya había ganas. Los aledaños del Ciutat de València volvieron a llenarse de vida y de color. Toda la vida y todo el color que permite un choque programado para las 23:00 de un domingo por la noche. Aún así, los más de 12.000 asistentes al partido mostraron ganas de ver rodar el balón una temporada más. No era un concierto de Sam Cooke, pero cada cántico que se entonaba en la grada del Ciutat de València erizaba el vello de los que habían esperado tan ansiado momento. Pese al Mundial, ha sido un verano largo, pero el balompié ya ha regresado.

El choque comenzó con intensidad. El Villarreal gozó de las primeras oportunidades. Un cabezazo de Cherysev terminó encontrando el larguero en el segundo minuto de juego. Poco después, un balón a la espalda de El Adoua lo cazó a la perfección Giovanni para recortar al marroquí. Su buena acción no encontró el premio del gol y el esférico salió demasiado alto.

El Levante comenzó con ritmo pero se deshinchó en la segunda parte

Pese a lo ofrecido en temporadas anteriores, y lo que se podía esperar en un partido frente a un equipo como el castellonense, fueron los locales los que trataron de mantener la posesión. Ésta, sin embargo, fue extremadamente horizontal en los primeros minutos. El Levante solo pudo pisar campo rival con balones largos o en jugadas rápidas como la que protagonizó Xumetra con el reloj señalando el primer cuarto de hora. El catalán dejó pasar un balón de Pedro López para deshacerse de su par y encarar el área de Asenjo. Su pase atrás lo conectó Camarasa tras un rechace. El disparo se marchó por arriba.

Había ritmo. Tanto en la grada como en el césped. Con el correr del tiempo, los granotas ganaron en confianza y en presencia en territorio groguet. Los de Mendilibar fabricaron una sensación de peligro peculiar, pues sin crear ocasiones claras, la sensación era de que podían hacerlo en cualquier instante. Cuando más factible parecía la llegada de un gol local, Giovanni, volvió a probar fortuna en el 36 para bajar los humos a los hombres de Mendilibar. Esto despertó a un Villarreal que terminó asediando la portería de Jesús Fernández antes de que el cuento encontrase el intermedio.

El Villarreal  acaba con un Levante desorientado

El arranque de la segunda mitad no encontró el ritmo que había impreso en el primer intervalo el Levante. Esto lo aprovechó el Villarreal a los diez minutos de la reanudación. Uche recogió un balón filtrado al interior del área para plantarse ante el debutante Jesús Fernández y poner el 0-1 en el marcador.

No iba a ser esta la única mala noticia para el Levante. Camarasa se lastimó en la pugna por un balón dividido. En su lugar entró Rubén García, algo que obligó a Víctor Pérez -que había sustituido a Ivanschitz tras el gol del Villarreal- al mediocentro.

El equipo azulgrana perdió el rumbo tras lo acontecido en el inicio del segundo tiempo. Esto lo pudo aprovechar el Villarreal. Lo intentó, al menos, pero Nikos, en el 69 salvó a los suyos sacando un balón que cruzaba ya la línea de meta.

El impacto del primer tanto fue demasiado para las huestes de Mendilibar. No se encontró reacción alguna. Ni la entrada de Rafael Martins modificó el ánimo ni el temple mostrado por el Levante. La buena imagen desplegada en el primer tiempo no se vio reflejado en el segundo acto y el partido terminó antes de hora. Concretamente en el minuto 85, cuando Cheryshev marcó a puerta vacía tras una carrera en solitario de Moi Gómez. Solo quedó tiempo para que Casadesús estrellase el balón en el poste con un cabezazo que trato de maquillar el resultado en el anochecer del partido.

Las novedades de Mendilibar

El técnico vasco confío en Víctor Camarasa para ocupar la medular. El de Meliana correspondió con una gran actuación. Seguro atrás y capaz adelante. Buen manejo del balón y mejor toma de decisiones. Por desgracia para los levantinistas, su partido terminó tras una pugna con Cheryshev en el 61.

Jesús Fernández fue el vencedor de la batalla por  un puesto en la portería granota. El madrileño no tuvo opciones en los dos tantos, en los que se vio vendido con sendos disparos en boca de gol.

El técnico vasco pretende que sus pupilos pierdan el miedo a manejar el esférico. Equipo trabajador, peleón y con toque. Buena imagen en el primer tiempo, un espejismo en el segundo.

Esperan Athletic y la Europa League

Tras un nuevo arranque liguero con derrota, el Levante viajará la próxima semana a Bilbao, donde se enfrentará al Athletic en un San Mamés completamente acabado. El Villarreal por su parte, espera cerrar su pase a la fase de grupos de la Europa League finiquitando la eliminatoria que ya quedó de cara en la ida frente al Astana. En liga, espera el Barcelona.

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Sobre el autor
Xavi Heras
Escribo sobre el fútbol que amo. Anglófilo. Northern Soul. Levante UD e Inglaterra.