El agua fue el protagonista principal del Gran Premio de Brasil. La carrera tuvo dos banderas rojas y cuatro neutralizaciones. A pesar de todos esos obstáculos, Lewis Hamilton se quedó con la victoria y redujo a 12 puntos la diferencia con Nico Rosberg, que fue segundo en Interlagos.

Hamilton: "Cuando llueve es un buen día para mí. Tenemos que dar las gracias a este equipo. Es increíble. Ha sido una carrera muy fácil. No he tenido ningún problema ni ningún momento difícil"

El show comenzó antes de que se apaguen los semáforos. Romain Grosjean se pegó mientras llegaba a la grilla y se quedó sin largar la carrera. Charlie Witting, director de carrera, informó que la competencia se largaba bajo auto de seguridad y con diez minutos de retraso.

Tras siete giros, el Safety Car se retiró de la pista y comenzaba la acción: Hamilton se escapaba de Rosberg y Max Verstappen, en una maniobra arriesgadísima, superó a Kimi Raikkonen para ser el tercero de la carrera. Varios pilotos arriesgaron en poner los neumáticos intermedios de lluvia. Primero lo hizo Renault con Kevin Magnussen y después Jenson Button.

Marcus Ericsson se pegó en la entrada a los boxes y se neutralizaba la carrera. El auto del sueco quedó cruzado y, por suerte, nadie lo chocó. Seis giros después se relargó pero Raikkonen sufría aquaplaning y chocó su Ferrari SF-16H contra el muro de boxes. El Safety Car en pista por un par de vueltas y posteriormente salió la bandera roja. Tras 25 minutos de espera, la carrera volvía a reanudarse detrás del auto de seguridad.

Rosberg: "Lewis hizo un trabajo estupendo, por supuesto. Las condiciones eran difíciles en esta ocasión. Esperaba la victoria pero puedo vivir con la segunda plazza conseguida hoy"

En el segundo tramo de la carrera, la pista comenzó a secarse y muchos pilotos comenzaron a utilizar los cauchos intermedios de lluvia. Los pilotos de Red Bull buscaban avanzar en el clasificador y el joven holandés tenía un ritmo infernal que amenazaba a Rosberg por el segundo escalón del podio.

Hamilton se escapaba de su compañero de equipo y en 14 vueltas le había sacado casi 20 segundos de ventaja. Prácticamente se aseguraba la victoria. Sergio Pérez, que venía haciendo un trabajo impecable, se mantenía expectante dentro de los cinco primeros. A falta de 20 vueltas para el final, Felipe Massa perdió el control de su Williams FW38 y colisionó contra los guardrails tapando el ingreso a boxes. La carrera se neutralizaba nuevamente y las diferencias se esfumaban.

Sebastian Vettel buscaba finalizar en el podio para salvar el fin de semana de Ferrari pero un veloz Verstappen se agigantaba en los espejos de sus rivales: primero superó al tetracampeón mundial dejándolo sin pista y luego se deshizo de Checo Pérez quitándolo de la posición de podio. Fernando Alonso se repuso ante las adversidades y finalizó décimo por detrás de Felipe Nasr, que por primera vez en el año entró en zona de puntos.

El campeonato se definirá el próximo 27 de noviembre en Abu Dhabi. Rosberg aventaja a Hamilton por 12 unidades y si el alemán es tercero será campeón sin importar lo que haga su rival. El británico que no se resignará fácil buscará el milagro.