La noche del sábado de NBA cerró con un verdadero partidazo cuando, en California, los locales Clippers recibieron a los Houston Rockets. Si bien en la previa se perdió un condimento ya que Chris Paul no podía estar presente por una lesión, esto le abrió una puerta a Pablo Prigioni para volver a salir a la cancha.

La intención del cordobés fue aprovechar su tiempo en cancha. Durante 16 minutos, 10 en la primera mitad y los restantes en la segunda, Prigioni le dio a su equipo parte del liderazgo perdido por la ausencia del base titular. Esto no se reflejó en las estadísticas ya que no anotó y dio dos asistencias.

Más allá que el partido tuvo un trámite parejo, la aparición de James Harden hizo notar antes de tiempo quien iba a ganar. La Barba estuvo durante casi 40 minutos en cancha y anotó ¡46 puntos! Un 5/10 en triples, 13/14 desde la línea y la ejecución de los mismos en momentos definitorios demostraron que el ayuda-base quiere tener revancha en la lucha del MVP, que perdió a manos de Stephen Curry en la 2014-2015.

Como si su ejecución no fuera trascendental, Dwight Howard también hizo un gran aporte para quebrar la balanza. De los 86 rebotes que hubo en el partido, el ex Magic se quedó con 20 de ellos (7 de carácter ofensivo) para que la visita tenga muchas más chances. Esta cifra también la consiguió a la hora de anotar, donde hizo pesar su físico en el poste ante el marcaje de Blake Griffin y DeAndre Jordan. Más allá de esto, el primero de ellos anotó 35 puntos y se quedó con 11 rebotes.

Así los Rockets fueron marcando el camino para imponerse por 109-95 y llegar a su cuarto triunfo. Ahora ambos equipos tienen la misma cantidad de partidos ganados, aunque el local acumula dos derrotas mientras que la visita tres. Los primeros recibirán a los Memphis Grizzlies el lunes, mientras que los restantes lo harán con los Brooklyn Nets el miércoles.