Nunca en toda la historia de la Final Four se había visto un resultado tan abultado. Villanova aplastó, humilló y barrió este sábado a Oklahoma por 44 puntos de diferencia, récord histórico del torneo, superando los 34 de Cincinnati a Oregon en 1962 y a Michigan State que doblegó Penn State por esa misma diferencia en 1979.

El comienzo de la semifinal estuvo pareja, pero Los Wildcats de Villanova no tardaron en demostrar su juego con una intensa defensa que obligaba a los de Oklahoma a lanzar triples molestos y sin eficacia. Con este gran trabajo en cada sector del campo, Villanova sometió a los Sooners con un parcial de 21-4, finalizando también la primera mitad con un contundente 42-28 y un 66,7% en tiros de campo. Josh Hart fue la figura de esta primera etapa con 15 puntos.

"Nunca imaginé que pudiéramos ganar de esta manera”, reconoció el entrenador de Villanova, Jay Wright. “Oklahoma es un gran equipo que tuvo una muy buena temporada. Pero mis muchachos hoy se desempeñaron de manera perfecta”.

La segunda mitad fue una humillación de principio a fin. Los de Villanova abusaron de los robos con grandes actuaciones de Mikal Bridges y Josh Hart, la figura de la primera mitad. Mientras por Oklahoma, la estrella universitaria Buddy Hield no pudo hacer pie en todo el partido, tampoco pudo moverse demasiado en la zona de ataque. El escolta de los Sooners promedió 25.6 puntos en la temporada, pero en esta semifinal apenas anotó 9 puntos en escasos 12 intentos de campo. El abuso fue tan grande, que Villanova finalizó con un 71.4% en tiros de campo (segundo porcentaje más grande de la historia) contra un nefasto 31.7% de Oklahoma, para finalizar el aplastante triunfo por 44 puntos que lo llevan a la final del campeonato nacional como un claro favorito.

Josh Hart fue la figura de la semifinal con 23 puntos, 8 rebotes y 4 asistencias.