En la previa adelantábamos que ambos elencos no se habían sacado diferencias en la etapa de fase regular. Se dividieron las victorias con dos para cada lado.

El Heat plasmó desde el arranque una sólida premisa: el juego colectivo. Con un total de 27 asistencias, diez de ellas de Goran Dragíc, la defensa visitante no logro hacer pie y se sintió altamente superada por la buena circulación de balón. Quizá uno de los factores decisivos para explicar el porqué de la derrota.

El ex Chicago Bulls, Luol Deng se destacó desde el arranque con 14 puntos y una efectividad del cien por ciento  en triples (3/3), Además, el joven Hassan Whiteside hacia lo suyo con diez puntos(4/4 en tiros de cancha).Por su parte, los Hornets eran puras individualidades. El francés, Nicolás Batum era lo mejorcito con nueve puntos.

Miami soltó todo lo que planifico para este duelo y al cierre del primer periodo la ventaja era casi irremontable. (41-22)

En su última presentación con Bolton Celtics, los de la florida habían dejado escapar un triunfo en el que llevaban la delantera por 26 unidades. Esto mantenía la ilusión que con el correr del juego Charlotte pueda recortar y llevar el tanteador a un digito. Ese deseo estuvo muy lejos de cumplirse porque el local no le otorgo las chances y la distancia siempre rondo en los 20 tantos.

Cuando un equipo actúa como tal, su andar se refleja en el resultado. Cada uno de los jugadores que saltaron al campo aportó su granito de arena. Hasta el escolta, Dorell Wright que participo apenas cuatro minutos, dañó al rival con 8 tantos   De esta manera para el comienzo del último cuarto la cosa seguía con diferencia de 23. (97-74)

Los titulares estuvieron en acción hasta redondear los cuatro minutos que tardaron en venirse los relevos. La pareja de internos, Luol Deng y Hassan Whiteside se fueron como figuras. El primero consiguió 31 puntos y 6 rebotes y el segundo sumo un nuevo doble-doble con 21 tantos y 11 atrapes. De esta forma,los Hornets deberán corregir mucho para el próximo choque. Tendrán que buscar la manera de equiparar los 43 puntos anotados entre Nicolás Batum (24) y Kemba Walker (19) con una defensa más rigida.

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