El segundo juego de la serie entre San Antonio y Oklahoma se vio envuelto en una gran polémica. Cuando el Thunder tenía que ingresar la pelota con 13 segundos en el reloj y arriba por la mínima (98-97), un claro codazo de Dion Waiters impactó en el pecho de Manu Ginóbili. Era falta técnica, dos libres para los de Gregg Popovich porque estaban en bonus y reposición para el local. En pocas palabras, el lunes probablemente hubiese finalizado con la serie 2-0 a favor del conjunto texano.

Después de terminar el juego, ya en la zona mixta, el árbitro principal del juego, Ken Mauer, fue entrevistado por el periodista Mike Monroe de “The Rivard Report”. Cuando al referí le preguntaron que vio, respondió: “En la cancha, no vimos una falta. Sin embargo, después de revisar nos dimos cuenta que hubo una falta ofensiva. Es una jugada que nunca antes habíamos visto, pero creemos que debimos sancionar una falta ofensiva de Waiters”.

Mientras el enojo sigue vigente en San Antonio, Manu habló de la jugada polémica: “Estaba intentando presionar a Waiters y creo espacio para sacar con su codo. Es una jugada extraña, no es algo que pasa seguido. Por eso los árbitros no vieron la acción, pero debió ser foul”.

Sin embargo, el ayuda-base argentino se mantuvo fiel a su forma de ser y añadió: “Después tuvimos la pelota, un gran tiro con Mills en el costado, también otras oportunidades… Sono cosas que pasan, nosotros tampoco concretamos. No es un error arbitral que definió el partido, también tuvimos otras chanes. Ahora la serie está 1-1  y tenemos que ir a ganar a Oklahoma”.

Lógicamente, también le preguntaron a Popovich (headcoach de los Spurs) sobre la acción y mencionó: “Algo debió ser pitado, pero creo que también tuvimos nuestros fallos. Estuvimos lentos, nos vimos superados”. En tanto Aldridge, quien también sufrió un foul de Waiters en el último tiro de la noche, sumó: “Se siente horrible, nos da bronca. Pero son cosas que pasan y hay que seguir”.