Comenzaron los Juegos Olímpicos para el básquet de Francia y Australia. Un enfrentamiento entre dos selecciones que son candidatos a llevarse una medalla. En los papeles, el conjunto europeo, de la mano de Tony Parker, era el candidato a quedarse con el match. Sin embargo, los Boomers arrancaron de gran manera y muy inspirados en la ofensiva. Aron Baynes 13 y Andrew Bogut 16 en la pintura y dos triples de Patrick Mills 16, llevaron a los de Oceanía a ponerse 20 a 14 en el primer cuarto. Francia tuvo errores en ataque (seis pérdidas en seis minutos) y no encontró el rumbo.

El destacado despliegue y la movilidad en equipo siguió para Australia en el segundo período. Se podría decir que los dirigidos por Andrej Lemanis estaban teniendo una actuación deseada. Pero el magnífico Parker, luego de tomar un descanso, se despertó y convirtió 13 puntos seguidos para achicar la ventaja (36-33). 

El resultado podía ser para cualquiera, pero los Boomers volvieron a mostrar los dientes y sacaron 10 de diferencia. El juego rápido y una defensa consolidada fue la fórmula para estar arriba en el marcador. El equipo francés estaba sin ideas y esperando alguna reacción del base de San Antonio Spurs. Con el tanteador 61 a 48, Francia estaba obligado a quemar todas las naves en el último segmento.

El talento y la eficacia de Matthew Dellavedova, campeón con los Cleveland Cavaliers, tomó importancia a la hora de asistir a sus compañeros. Australia fue más que Francia durante todo el partido y lo superó tanto en la técnica como en la táctica. Un 87 a 66 que ilusiona y lo pone como candidato para pelear en los primeros puestos. Ahora, los Boomers enfretarán a Serbia para seguir por la senda del triunfo y Francia tendrá que ganarle a China para tener alguna esperanza.