En un duelo con protagonistas de la división central, Detroit demostró que, si bien falta mucho, sueña con volver a los Playoffs para dar pelea en el este. En su casa, el equipo de Stan Van Gundy venció al joven Milwaukee por 98-83 para llegar a récord 2-1.

Si bien el dueño de casa tuvo a cinco hombres en doble dígito anotador, Andre Drummond fue la gran razón del triunfo Piston. El ala-pívot volvió a ser una pesadilla para su rival en los tableros, peleando constantemente para ganar pelotas y darle a su equipo el dominio del juego. El interno ganó 23 pelotas (ocho de manera ofensiva) para tener una producción vital que se vio complementada con 20 puntos (doble-doble) y tres bloqueos. En tres presentaciones por la 2016/2017 de Detroit, Drummond sumó su segundo juego con más de 20 rebotes.

En cuanto al resto del juego, el dueño de casa fue muy superior, desplegando una intensa defensa para forzar pérdidas y explotar la zona pintada rival. 56 de las 98 unidades las sumó Detroit en ‘Tierra de gigantes’, mientras que añadió 15 tantos desde la línea de tiros libres. Kentavius Caldwell-Pope ejecutó dos robos para sumar 21 puntos, mientras que Tobias Harris lo acompañó con otras dos pelotas tomadas para acumular 16.

Con estos esfuerzos defensivos, Milwaukee la tuvo muy complicada para anotar (38,1% de campo). Más allá de esto, el equipo de Jason Kidd volvió a tener como mejor productor al griego Giannis Antetokounmpo. El alero de 21 años sumó 17 puntos, ocho rebotes, ocho asistencias y tres bloqueos en 38 minutos de juego. En tanto Jabari Parker aportó 13 unidades y seis rebotes.