Un equipo joven necesita tiempo para aprender a manejar presiones, y más cuando está en la NBA. Durante las últimas temporadas, Phoenix tuvo muchos problemas para ganar en los momentos de paridad durante los minutos finales de juego. El conjunto del estado de Arizona se quedó con las manos vacías en varios partidos en los que dejó todo frente a grandes rivales. Así nunca pudo volver a estar en los Playoffs.

En esta 2016-2017, la situación parece empezar a cambiar. El equipo de Earl Watson no tuvo el mejor arranque de temporada con cuatro caídas al hilo-y esto se repitió el pasado viernes 28 de octubre, cuando Oklahoma lo venció en casa 113-110 en suplementario-, el plantel viene dando sorpresas ante duros rivales. Pero este miércoles, ante otro combinado fuerte como Portland, el conjunto Sun pudo quebrar su mala racha para vencer 118-115 en OT y sumar su primer triunfo en el torneo.

El dueño de casa hizo un gran trabajo en la pintura, explotando cada error Blazer para tomar ventaja. Liderado por el mano a mano de Bledsoe (20 puntos) y Warren (27 unidades), además de las cortinas y rebotes (18) de Chandler, el local empezó a tener grandes chances de ganar el juego. Pero Portland arremetió en el final. Con Damian Lillard (27 puntos y cinco asistencias) y C.J. McCollum (24 pts) como guías, el equipo de Terry Stotts se puso al frente por siete puntos (90-83) con cinco minutos por jugar.

Ahí fue cuando Phoenix volvió a apelar a su juego de corte al aro y forzando faltas, más errores de Lillard, se puso al frente por dos con un segundo en el reloj. Sin embargo, una desatención defensiva en la reposición dejó muy sólo a Meyers Leonard, quien anotó su bandeja para igualar la historia en 103 e ir a suplementario.

Allí el dueño de casa volvió a ponerse en ventaja, en este caso por seis puntos, y dos And 1 (uno de Harkless y otro de Lillard), volvió a emparejar la historia con seis segundos en el reloj. En esta ocasión, el equipo de Earl Watson no falló: Bledsoe tomó un complicado triple y encestó para el 118-115.