New Orleans obtuvo su primera victoria en la temporada y lo hizo frente a los jóvenes Lakers. Con la participación estelar de su figura, Anthony Davis, quien cosechó 27 puntos, 17 rebotes y 3 tapones, los Pelicans construyeron un triunfo que fue muy bien armado desde el inicio de juego, peligró en los minutos culminantes pero finalmente, con la mente fría, se lo supieron adjudicar.
Junto con DeMarcus Cousins (22 tantos, 11 recobres, 8 asistencias y 2 bloqueos), la pintura tuvo dueño durante los 48 minutos en el Staples Center, un estadio que todavía no le es cómodo a Los Angeles Lakers (todavía no pudieron ganar ahí: 0-2). Además, las buenas labores tanto de Jrue Holiday (14), Etwaun Moore (19) y ayudando desde la segunda unidad, Ian Clark (14), el conjunto de Luisiana fue claro dominador del partido durante los primeros tres períodos.
En el anfitrión, Jordan Clarkson convirtió 24 puntos y fue el máximo destacado en ese rubro, además de repartir 5 asistencias. En lo que concierne a pases gol, el rookie Lonzo Ball fue el mejor en esa clase con 13, pero al igual que el primer partido, no pudo explotar al máximo su goleo (solamente 8). Igualmente, Kyle Kuzma, también de primera temporada en la NBA, sumó desde el banco 20 tantos y 6 rebotes, y Kentavious Caldwell-Pope finalizó con 20.
En el último cuarto apareció la tensión en la noche de Los Angeles, cuando el local achicó la ventaja, se puso a uno (97-98) y logró pasar al frente faltando 7m (101-98), pero Pelicans mostró juego colectivo y mucha paciencia para volver a tomar el mando en el marcador y empardar en 110. Finalmente clavó un 9-2 para cerrar números en 119-112.
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