El encuentro tuvo un comienzo parejo, con ofensivas rápidas de ambos elencos. Instituto gozó de un goleo repartido donde anotaron los cinco en cancha, y Quilmes contestó a puro triple (Enzo Ruíz 10 puntos). Hasta que el Cervecero cosechó la primera ventaja (20-12). La defensa en zona de Quilmes le complicó las acciones de ataque a un Instituto que perdió fluidez (5 pérdidas). Y es por eso que el conjunto de Javier Bianchelli rubricó un 25-18 para cerrar el primer capítulo.

El segundo parcial lo inició Instituto con un tiro que prometía una recuperación ofensiva. Pero Quilmes rotó de mejor forma, tanto en defensa como en ataque, conquistó el desarrollo del juego tras un parcial 7-0 (35-22).

Con el paso del tiempo, el conjunto local adquirió mayor solidez y logró mantener la intensidad defensiva, con buenos porcentajes en ataque. Esto derivó en un cuarto, que lo vio líder desde todo punto de vista con una ventaja más que buena de 20 puntos (53-33).

Dwayne Davis castigó con cuatro triples las equivocadas tomas de decisiones de Quilmes en ataque, e Instituto comenzó a recortar distancias (61-51). Javier Bianchelli pidió presión en todo el terreno de juego, poniéndole freno al conjunto cordobés. Los oportunos triples de Enzo Ruíz, hicieron que el marcador quedara a favor del local 69-58 al término del tercer parcial.

Con varios triples seguidos Instituto abrió el último parcial, que ayudado por las ofensivas desprolijas de Quilmes, recortó a seis la desventaja (73-67). Bruno Sansimoni y Omar Cantón tomaron la posta para que el local no cayera totalmente. Con 13 puntos entre los dos, las asistencias del joven base y los rebotes de Emiliano Basabe, le dio pelea a Instituto. Ni la estupenda noche Dwayne Davis le sirvió a los cordobeses, esta vez Quilmes pudo cerrar el juego a su favor, supo administrar la ventaja ante un rival que buscó cambiar la historia del partido. El final fue 95 a 86 a favor del Tricolor, que ante Instituto, volvió a sonreír.