Luchadora, pujante, lúcida y creativa son algunos adjetivos que definen su profile basquetbolístico. Más allá de su tezón desplegado muchas veces en el parquet, le costó definir su futuro en el mundo de la anaranjada. Su nuevo hogar llamado Obras Basket la recibió de la mejor manera y el cuerpo técnico le otorgó una función principal en el teatro de operaciones del equipo: la organización de la tropa tachera. Junto a Bereilh, en cada partido, se erigen en una suerte de entrenadoras dentro de la cancha con el afán de otorgarle orden y funcionalidad al equipo.

Es el caso de Florencia Martínez quien, en diálogo con Vavel Básquet, nos brindó su visión sobre el comienzo de Obras en esta nueva edición de la Liga Femenina. Sobre el nivel de juego demostrado en estos partidos, el cerebro de Obras dijo: "En el partido contra Quimsa mantuvimos la paridad por la defensa. Nos hicimos fuertes en ese punto y construímos el juego desde atrás para terminar sólidos en ataque. Destaco que pudimos llevar a cabo el plan de juego planteado desde un principio y apoyarnos en nuestra intensidad". Y comparó: "Luego en los demás partidos tuvimos la capacidad de revertir y de recuperarnos de tanteadores adversos, pero aprendimos que no nos podemos relajar en ningún momento". Con respecto a las debilidades del equipo y las variables a ajustar, Martínez señaló: "Nos falta rodaje y es una buena oportunidad para construir algo sólido. Creo que tenemos que defender en bloque que nos permitan tomar rebotes limpios y sumar puntos corriendo".

La flotadora de Florencia Martínez. Foto: Bandeja Olímpica
La flotadora de Florencia Martínez. Foto: Bandeja Olímpica

Un punto interesante que ocurrió en el partido contra Berazategui y que surgió, en menor medida, contra Rocamora fue la ausencia de jugadoras claves por acumulación de faltas como fueron los casos de Johanna Puchetti y Agostina Burani ante el conjunto bonaerense y entrerriano, respectivamente. En ese detalle, Florencia coincidió y explicó: "En el encuentro ante Berazategui, hicimos un gran esfuerzo y acortamos la diferencia. Teníamos varias jugadoras con faltas y eso nos costó en la rotación del equipo".

El equipo. Foto: Obras Basket
El equipo. Foto: Obras Basket

En cuanto a su faceta individual, la ex jugadora de Unión Florida consideró que puede adaptarse, perfectamente, a la doble base planteada por el DT Francisco Pirani o como única administradora de juego. Sin embargo, opinó: "Para mi el rol nunca es tan definido o estático. Me parece que el equipo y el pasar de los partidos va exigiendo distintas necesidades que hay que suplir. Creo que hoy la prioridad está en encontrar la virtud de cada una, conocernos para potenciar lo mejor de la otra. Es un lindo desafío personal y grupal". 

La mejora constante es algo más que un slogan de la patria de la autoayuda de este siglo XXI. Es una proeza que toda basquetbolísta quiere seguir y Martínez no es la excepción. Su cuota de sagacidad y su clásica "voladita" son algunos de los múltiples aportes que hace para explicar el presente de Obras en la Liga Nacional Femenina.