Sin dudas una noche de lunes que los Sixers y su fanaticada no olvidarán por lo perfecto que fue la misma, debido a que terminaron con la sequía de 14 derrotas contra los Toronto Raptors, en donde lo pudieron superar por la distancia de un doble y un triple. Dicho encuentro fue por el segundo game de la semifinal de la Conferencia del Este, en donde Philadelphia demostró la otra cara de la moneda, pero no su mejor versión.

Como se pudo observar los Raptors dominaron todo el primer game, pero si los 76ers querían hacer lo propio para poner en equilibrio la serie, lo hicieron en un dominio total en la primera mitad. Pese a que su All-Star, Joel Embiid, no se encontró al cien por ciento por un problema estomacal; pudo sacar el encuentro adelante en donde en la primera mitad se aventajó con 20 unidades.

No obstante un respaldo que tuvo el elenco dirigido por el coach de Brent Brown fue Jimmy Butler, quien fue fundamental desde la pintura y supo estancar a los Raptors con un 32 por ciento de disparos, incluyendo solo 3/15 de 3.

Jimmy estuvo intratable en el segundo juego en donde 13 puntos fueron anotados en los dos primeros cuartos; misma distancia que mantuvieron hasta el tercer cuarto su equipo porque esa misma cifra fue la cantidad de pérdidas que tuvieron los Sixers para que los de Toronto se mantuvieran a tiros de la remontada. Butler terminó con 30 puntos, incluyendo los ocho tiros libres y agarró 11 rebotes.

Para el último cuarto, ambos conjuntos mostraron su eficacia en el tablero para sumar; pero los de Philadelphia aprendieron la lección del primer juego y supo marcar bien en los ataques recibidos para finiquitar el encuentro por una mínima preeminencia de 5 tantos, en donde la segunda mitad también es marcada por los errores como las pérdidas ya mencionadas.

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