La noche de viernes nos encontraba en La Banda para el tercer partido de las semifinales de una nueva edición de playoffs de la Liga Nacional. Tras dos victorias en Alta Córdoba, la Gloria llegaba con ganas de cerrar la serie en tres partidos y sellar rápido su pase a las finales.
En el primer cuarto, la defensa ejercida por Instituto hacia Solano Paulino (una de las principales cartas de ataque en el equipo negro), impidió que los locales pudieran encontrar su rumbo en el juego, a excepción de esporádicas intervenciones de Machuca y Basualdo. Los locales tuvieron un bajísimo porcentaje en tiros largos (1/7). La visita defendió bien, evitando penetraciones y contó con aportes ofensivos diversos, sobre todo ganando en la pintura, con un Batista Hernández enchufadísimo. Fue 22 a 13 para la Gloria que empezó firme y nunca cesó.
En la segunda mitad del primer tiempo y con el uruguayo Batista dominando la pintura, la “Gloria” obtuvo una victoria parcial de 13 puntos, mientras que los locales no encontraron el rumbo ofensivo encestando sólo 4/16, mostrando así la ineficacia del local para anotar. Los locales se fueron al descanso largo abajo 29-42.
En el tercer cuarto nada cambió para los locales que siguieron sin encontrar eficacia en sus tiros. Pero sí cambió para Instituto, quien siguió siendo un claro dominador del juego. La Gloria comenzó a tirar de larga distancia con una alta efectividad, encestando 6/7 para conseguir una amplia diferencia de 30 puntos (70 a 40), para terminar ganando el cuarto 79 a 53.
El último tramo no fue más que un agregado y sirvió para que el público local devuelva con cantos y aplausos la alegría que este equipo les dio al llegar a semifinales. Ambos equipos rotaron a sus jugadores y no cambiaron las cosas, de manera que Instituto se llevó el encuentro con una abultada diferencia de 33 puntos.