Luego de haber perdido sus dos últimos encuentros, los Boston Celtics debían recuperar la ventaja en la serie si quería llegar al sexto encuentro  con una mochila menos pesada en su espalda. En el TD Garden, y frente a un rival que no plasmó su mejor juego, el equipo de Brad Stevens no tuvo inconvenientes al establecer +20 de ventaja en el segundo cuarto para estar tranquilo durante todo el segundo tiempo y, finalmente, llevarse el encuentro por un claro 123-101.

Avery Bradley cerró una monstruosa noche con 29 tantos, seguido con el buen partido de Al Horford (19), Jae Crowder (18) e Isaiah Thomas (18). En  los Wizards no alcanzaron los 21 tantos de John Wall ni los 16 de Bradley Beal.

Al cabo del primer tiempo, Boston apenas transpiraba y sacaba una ventaja de 16 (67-51). Otto Porter salió para intentar la remontada pero eso apenas duró unos pocos minutos. Entre Bradley y Crowder desde el perímetro castigaron  a un Washington que en ningún momento pudo hacer pie en el partido. Con un abrumador 93-76, se iniciaba el cuarto final.

La endeble noche de Thomas cambió de color con un par de triples, sumados a los convertidos por Marcus Smart y Kelly Olynyk para sacar una máxima de 20. Finalmente el cronometro llegó a cero y los Celtics se pusieron nuevamente en ventaja, quedando a tan solo una victoria de la Final del Este.