El combate entre el argentino Diego “La Joya” Chaves y el ex campeón mundial welter Timothy Bradley terminó en empate, luego de que la tarjeta de los jueces marcaran 116-112 (Cháves), 115-113 (Bradley) y 114-114. El fallo retumbó en todo el hotel Cosmopolitan de Las Vegas, sobre todo en los rincones de ambos boxeadores, que no se esperaban ese desenlace por lo que brindaron en el ring.

La cara de sorpresa lo dice todo. Tanto Bradley como la Joya quedaron disconformes con el fallo de la pelea. Una reyerta que comenzó muy dinámica. Hasta el quinto asalto, el combate se hizo muy friccionado. Ambos púgiles se midieron en la corta distancia, intercambiando golpes y probando la resistencia del otro. A partir de allí, la contienda se inclinó a favor del estadounidense, quien en cada asalto salió con una estrategia distinta.

Chaves careció de convicción para inquietar en los momentos cumbres de la pelea al púgil que supo ser monarca superligero de la Organización Mundial de Boxeo (OMB), título que perdió ante el filipino Manny Pacquiao. El bonaerense no tuvo decisión para acorralar a su rival, quien combatió desde el cuarto round con su pómulo izquierdo totalmente inflamado. Pese a no haber título en juego, una victoria lo hubiera posicionado al argentino en el lote de los que podrían competir por un título Mundial. Sin dudas un empate con sabor a derrota. 

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