Después de todo, Víctor Ortiz no enfrentará a Brandon Ríos, pero se enfrentará a otro veterano duro, ya que se encontrará con John Molina Jr. el domingo 30 de septiembre en un evento principal de PBC televisado por FS1. Ortiz (32-6-3, 25 KO) viene de un empate disputado con Devon Alexander en febrero, una pelea que la mayoría de los observadores sintieron que Alexander claramente ganó.  

Ha estado subiendo y bajando, o tal vez hacia abajo y hacia arriba y hacia abajo y hacia arriba y hacia abajo, desde su victoria de la 'Lucha del Año 2011' sobre Andre Berto. Después de esa victoria, Ortiz fue infamemente noqueado por Floyd Mayweather, luego se le rompió la mandíbula en una derrota ante Josesito López, además fue eliminado en dos por Luis Collazo. Él ganó un par de puestas a punto después de eso, y luego fue noqueado por Berto.  

Ganó otra puesta a punto, luego recorrió la distancia en una actuación sólida contra Alexander. Pero han pasado más de siete años desde que Ortiz derrotó a un oponente de la sustancia. Todavía es relativamente joven a los 31, pero el tiempo no está de su lado, y más que eso, los resultados no lo son.  

Molina (30-7, 24 KO) subirá de 140 libras para la pelea. Recientemente peleó en diciembre de 2017, noqueando a Ivan Redkach en la cuarta ronda. Eso siguió a una derrota ante Terence Crawford, que continuó con una gran victoria de Molina sobre Ruslan Provodnikov en 2016, una pelea que casi nadie esperaba que ganara.  

La mayoría de sus peleas más importantes han sido derrotas, incluyendo derrotas ante Lucas Matthysse, Humberto Soto y Adrien Broner, pero Molina, como Ortiz, nunca está en lo que se llamaría una pelea completamente mala. Los estilos hacen peleas, y este, aunque no es un gran evento de marquesina, tiene el potencial de ser un petardo solo por la forma en que Ortiz y Molina abordan las cosas. 

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