Llegó la semana en la que se llevará a cabo una de las peleas más esperadas del año. Este sábado en el T-Mobile Arena de la ciudad de Las Vegas, Estado de Nevada, se disputará la revancha entre el campeón Mediano del Consejo Mundial de Boxeo y el Supercampeón de la Asociación Mundial de Boxeo, el kazajo Gennady GGG Golovkin (38-0-1 34KO) y el mexicano Saúl Canelo Álvarez (49-1-2 34KO).

La contienda se disputará en medio de un clima de declaraciones cruzadas entre los equipos de ambos boxeadores, principalmente debido al doping positivo del Canelo por clembuterol en marzo pasado, lo que obligó a postergar el combate que se iba a realizar el 5 de mayo.

Justamente hace casi exactamente un año, el 15 de septiembre de 2017 tuvo lugar la primera pelea entre GGG y Canelo en el mismo escenario que albergará la revancha. El combate se caracterizó por las diferencias de estilos entre ambos boxeadores: la línea técnica y la defensa del mexicano, contra con el poder ofensivo del kazajo.

Los primeros rounds de la pelea favorecieron al Canelo, ya que se mostró mucho más efectivo, aprovechó su velocidad y manejó las distancias medias y largas, ante un Golovkin que si bien era efusivo en su ataque no encontraba la claridad de necesaria como para desbordar al mexicano.

A partir de la cuarta vuelta, el mexicano empezó a mostrar algunos signos de fatiga debido a la intensidad que había exhibido en los tres primeros asaltos, mientras que GGG aprovechó esas circunstancias y empezó a mostrar su artillería y conectó varios golpes del poder sobre la humanidad del Canelo.

Foto: AFP
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Lo mejor del kazajo se vio del quinto al octavo round, donde mantuvo una presión intensa y aprovechó el cansancio físico de Álvarez, que mostraba jadeante, abría la boca y bajaba los brazos constantemente. Las últimas vueltas mostraron a un Canelo con un segundo aire y donde volvió a mostrar algunas de las cualidades que había exhibido en los primeros asaltos, a las que le agregó algo de más de potencia en sus envíos, que generaron varios intercambios vibrantes sobre todo en los asaltos 11 y 12.

La pelea que parecía que en cualquier momento podía terminar en un nocaut, finalizó con la decisión, cuestionable según desde donde se lo vea, de los jueces que dictaminaron empate tras doce asaltos de combate. Las tarjetas marcaron los siguientes números: Adalaide Byrd (118-110 Canelo); Dave Moretti (115-113 GGG) y Don Trella 114-114. Las declaraciones post-pelea dejaron en claro que ambos querían una revancha, que finalmente se dará el próximo sábado, cuando para muchos se decida el próximo número uno libra por libra.