Se veía que iba a ser un partido complicado y muy peleado, porque a O’Higgins solo le servía ganar para pasar a octavos de la Copa Libertadores, y Lanús debía empatar o ganar. El grupo 3 fue competitivo, hasta el último minuto todos tenían chances de clasificar. Y finalmente pasaron Lanús y el paraguayo Cerro Porteño.
El conjunto dirigido por Guillermo Barros Schelotto sufrió en suelo chileno para lograr un empate y así obtener la clasificación a la siguiente ronda.
Fue un partido peleado, duro y sufrido en el que la gran figura fue el arquero Agustín Marchesín con numerosas atajadas que le permitieron a Lanús seguir con vida en la Copa.
La jugada clave del partido fue al final del partido, a los 84 minutos el árbitro señaló un penal a favor de O’Higgins, un penal que no fue, no debió haber sido cobrado, porque Somoza no tuvo intención de tocar el balón con la mano, pero el juez interpretó lo contrario. Calandria se dispuso a patear, y la gente del Granate imaginaba lo peor, pero el arquero se vistió de héroe y le detuvo el penal al jugador del equipo chileno y Lanús volvió a respirar.
El partido en sí fue entretenido, con superioridad del conjunto chileno que buscaba si o si el gol que le diera el triunfo, pero Marchesín estuvo inspirado y sacó todas las pelotas que llegaron a su arco y pudo mantener la valla invicta y darle a su equipo la clasificación.
Sobre el final el partido se calentó, con la expulsión de Gustavo Barros Schelotto, luego con la sanción del penal en contra de Lanús y las fuertes protestas de Silva, que fue amonestados, pero luego de que Marchesín atajara el penal el delantero del granate le gritó al árbitro y éste lo expulsó, por lo que Silva debió ser contenido por sus compañeros para no pegarle al juez. También Hernández fue expulsado, por doble amonestación, a los 89 minutos.
Es repetido, y será para repetirlo muchas veces, Marchesín estuvo increíble y le dio la clasificación a Lanús, que festejó en Chile.
Con el 0-0 Lanús clasificó en la 2° posición de su grupo y deberá jugar con el 1° de otro grupo, de acuerdo a cómo se decidan los octavos de final, mientras que Cerro Porteño, que venció a Deportivo Cali por 3-2, clasificó 1° del grupo.
El Granate atraviesa un buen momento y lo viene demostrando. Es el último campeón de la Copa Sudamericana, está con un buen presente en el torneo local y clasificó a octavos de final de la Copa Libertadores. Por eso el equipo del Mellizo tiene razones para ilusionarse con conseguir algo más grande, y van a luchar por la Libertadores.