A puertas cerradas por expreso pedido de Rodolfo Arruabarrena comenzó el entrenamiento de Boca de cara al Superclásico. Con trabajos livianos y un entrenador que probó cambios en la defensa, el plantel se enfoca ya en lo que será un choque trascendental para las aspiraciones xeneizes.

El técnico ensayó algunas variantes atrás y expermentó una línea de cuatro con: Fuenzalida, Pérez, Echeverría y Colazo. Se destaca el ingreso del mediocampista chileno en el lateral derecho y la presencia luego de varios meses de no haber formado parte del once titular de Claudio Pérez. De todas maneras, la semana recién comienza y habrá que esperar para ver si el Vasco se decidirá o no por un cambio de nombres.

El susto de la práctica lo protagonizó Andrés Chávez, quien trabajó diferenciado por una fatiga muscular. Instantes después se le sumó Fernando Gago, aunque de todas maneras ambos jugadores serían de la partida el domingo y están siendo preservados para llegar de la mejor manera al Superclásico,

La buena noticia la dio Pablo Ledesma, quien ya se mostró recuperado de la luxación de hombro que lo apartó de las canchas por un mes y se entrenó a la par de sus compañeros.