El trabajo realizado por Atlético de Rafaela es muy bueno, y los números no dejan de sorprender, sobre todo para un equipo que el torneo pasado salvaba su permanencia de manera agonizante. A continuación repasamos algunas claves fundamentales para entender el buen momento del equipo santafesino.

UNO. 466 son los minutos que lleva Rafaela sin recibir goles. Y es que en el fútbol, es exactamente proporcional la importancia de marcar goles, como de no recibirlos, pues sino no hay confianza, no hay victorias, no hay ninguna posibilidad de destacarse y ganar. Esteban Néstor Conde es hoy por hoy una de las razones principales de que Atlético de Rafaela sea una de las revelaciones del Torneo. Perfil bajo, mucho trabajo y reflejos de lince para un arquero que motiva y tira para arriba el ánimo siempre.

DOS. Sería injusto destacar a Bastía en soledad, cuando Serrano, González y Rodríguez han sido igualmente importantes. El centro del campo de Rafaela cumple con todos los deberes: es un área de pierna fuerte cuando se lo necesita, se corta inteligentemente, cambia el ritmo y se hace un tránsito rápido para el contraataque, o se mete pausa. Aunque sí es cierto que de partido a partido algunos aparecen mientras otros bajan el ritmo: contra Racing Serrano estuvo intermitente en sus participaciones, y Rodríguez Rojas la rompió, cuando en otras oportunidades es al revés. Sin embargo, el mediocampo es lo más regular que tiene el equipo.

TRES. Cuando Rafaela acumuló las derrotas y los goles en contra en las primeras fechas, Sensini habló fuerte en la semana, retando a todo su equipo y pidiendo mayor compromiso. Pero la clave fue brindar la confianza en la fecha. Que hoy por hoy el equipo salga de memoria consecutivamente y se logren resultados, habla de lo bien que le hizo al equipo que el DT, en vez de probar con alternativas por los malos resultados, siguió apostando a una idea y a una convicción, que le hizo entender a los jugadores y que hoy desarrollan muy bien. Confianza e identidad, méritos absolutos del entrenador.

CUATRO. Que los jugadores entiendan que no tienen nada que regalar. A Rafaela no le sobran goles, no le sobra solidez en defensa, ni ataques plurales ni siquiera tiene una cuota goleadora muy ensanchada. Pero con lo que tiene, la concentración, el orden, la garra y aprovechar los momentos, han sido suficientes para llegar a los 17 puntos, y a estar entre los cinco primeros a 10 fechas del campeonato.

CINCO. La concentración con la que juega el equipo, se percibe a través de los 94, 95 o 96 minutos que dure el partido. Si bien la intensidad baja eventualmente, y se cometen errores tanto en ataque como en defensa, cada jugador sabe lo que tiene que hacer, y los circuitos futbolísticos funcionan óptimamente: no se ven pelotas regaladas, pases incorrectos o falta de diálogo.

SEIS. La suerte. Clave sobre todo en el partido contra Racing, donde una no tan pequeña cuota de suerte salvó ¡cinco! veces que la pelota diera en el palo en vez de entrar.