Esta mañana Estudiantes de La Plata volvió a entrenar pensando en el duelo de la penúltima fecha ante San Lorenzo. Luego de la práctica, Guido Carrillo atendió a la prensa y, al igual que ayer lo hizo Sebastián Prédiger, analizó lo que dejó el 2014 tanto en lo individual como en lo colectivo.

“Haciendo un balance es un año bueno. Uno por ahí siempre desea tener una cantidad de goles más elevada, pero este semestre me ha tocado jugar un poquito más lejos del arco. Así que ha sido un año positivo”, comentó el goleador oriundo de Magdalena con respecto a su desempeño personal. Y puntualizó que “el penal con Peñarol fue un momento de quiebre en el semestre”.

Así mismo, el capitán albirrojo también aprovechó la ocasión para elogiar el trabajo del actual cuerpo técnico pincharrata: “Todo jugador necesita un proceso de experiencia. Mauricio me ha dado esa chance y con cantidad de partidos uno gana confianza. Además adquirí otros movimientos con este nuevo cuerpo técnico. Ha hecho un trabajo con los chicos que nos cambió las formas de entrenar y preparar el fútbol. Técnicamente se sumó un montón”. Sin embargo, al mismo tiempo reconoció que “el primer año costó”.

Además, la figura del león platense se tomó un tiempo para hablar de su relación con la red. “Un 9 siempre se va de los partidos con una espina si no convierte”, señalo, aunque aclaró que “dentro de la cancha trato de no fastidiarme porque perdés concentración. Después en el vestuario uno lo analiza y dice `qué bronca que no me tocó´”.

Y antes de concluir la entrevista concedida a ‘El equipo Deportivo’, Carrillo dejó un deseo para el año próximo: “Ojalá juguemos la Libertadores”.