Detrás de los 22 jugadores que se encuentran dentro del campo siempre hay una historia de vida para contar. Pese a la distancia geográfica que separa a Nueva Zelanda de Argentina, hoy el fútbol las une.
Un viaje que comenzó como un cambio, una travesía, terminó llevando a Emiliano Tade al Mundial de Clubes. Este santiagueño, que se desempeña como delantero, es una de las grandes figuras del Auckland City FC y del fútbol neozelandés. Sin embargo, en su llegada a Nueva Zelanda, el argentino se la tuvo que rebuscar.
El cambio de Argentina por Nueva Zelanda no fue sencillo. Pasó de ser un estudiante de abogacía que disfrutaba del fútbol, a un extranjero que no sabía hablar el idioma, por lo que la adaptación fue un tanto más complicada. Sin embargo, la vida siempre da un giro y en este caso fue positivo.
Comenzó a trabajar como lavaplatos en un restaurant, hasta que aprendió a hablar inglés. Luego de eso, Tade se probó en dos clubes amateurs del fútbol neozelandés, hasta que decidió fichar por el Wellington United en 2009. Un año más tarde, pasó a la liga semiprofesional del país oceánico al fichar por el Team Wllinton. Tras una buena temporada, el Auckland City, uno de los equipos más poderosos de Nueva Zelanda, lo contrató como profesional en 2011.
Tade se ha convertido en uno de los jugadores más importantes del conjunto neozelandés. De hecho, fue quien hizo el gol para la clasificación al Mundial de Clubes. Además, fue elegido como el Mejor jugador del torneo, del que también fue goleador junto al tahitiano Naea Benett. A sus 26 años, este santiagueño que emprendió una aventura hace unos años, se convirtió en figura e ídolo del fútbol neozelandés.