El enganche llegó a River en julio de 2014 entre miradas y dudas. Parecía un jugador más, que no le iba a dar al club lo que necesitaba: volver a ser River. Hoy, cuando apenas pasaron unos meses desde su debut ante Ferro en Copa Argentina, el volante se conviertió en una figura determinante del equipo.

De los goles que hizo el Millonario en el semestre, Pisculichi participó en 23. Su fina pegada es el arma letal, ya que de los siete tantos oficiales que marcó, hizo cinco con remates desde afuera del área, dos de los cuales fueron de tiro libre (a Independiente y Atlético Rafaela).

Por la Copa Sudamericana, hizo el gol de la clasificación contra Boca en la semifinal, y también la metió en la final, contra Atlético Nacional en Medellín. Estos dos tantos le hicieron un espacio en la historia más gloriosa del club. "Los dos representan mucho. El que le hice a Boca por lo que significa el rival. Pero también es lindo hacer uno en una final. Es difícil optar por uno, me quedó con los dos", dijo.

El mediocampista de 30 años fue elegido como la figura de La Banda en la Copa Sudamericana 2014 que pudo obtener por primera vez en su historia. Tuvo que venir un 10 de la estirpe riverplatense para que el Millonario pudiera volver a la conquista internacional. Piscu, hombre clave en la consagración, fue elegido por los hinchas como el mejor del plantel durante el último semestre, ya que el equipo millonario también disputó el Torneo local hasta el último minuto.

El Muñeco apostó por la llegada del enganche y éste no lo defraudó. Mostró jerarquía para hacerse cargo de unas de las ofensivas con más peso del país y fue fundamental en un semestre fructífero. River consiguió su sexto título internacional y llegó peleando al final del torneo, en buena parte por la pegada y habilidad del hombre surgido de Argentinos Juniors.

Gol de Piscu a Boca:

Gol de Piscu a Atlético Nacional