Rosario Central hace mucho no tiene una identidad de juego clara, cuando estaba Miguel Ángel Russo al mando, si bien se consiguieron los objetivos, el equipo nunca tuvo una forma de jugar salvo en partidos específicos como en los clásicos.

En el partido de ayer se vio, por momentos, lo que el entrenador practicó durante las semanas de pretemporada. Coudet declaró varias veces que estaba preparando un equipo ofensivo, que presione, que cuando recupere la pelota tenga un cambio de ritmo significativo y que use la tenencia del balón por momentos para recuperar aire.

Lo más claro de ayer fue la presión en la salida del equipo rival, en campo contrario, los 3 delanteros iban cortando líneas de pase y encerrando al que tenía la pelota para que el mismo retroceda con el arquero o divida la pelota en campo de Central. Esa forma de juego desgasta, cansa y no se puede mantener por muchos minutos, por eso fue por intervalos de partido.

Lo que menos logró Central fue la tenencia del balón para descansar con él. Los jugadores se mostraron con muchas ganas de atacar, de jugar y de ganar, apenas recuperaban la pelota intentaban conectar rápido con los delanteros y en el afán de atacar y atacar, la pelota quedaba en poder de los uruguayos.

Se notó la explosión de velocidad en los pies de José Luis Fernandez, en los de "Chuky" Cervi, Aguirre y Ruben. Esos 4 rapiditos apenas veían un espacio verde ponían 5ta a fondo hacia el arco rival. Además, los compañeros, Barrientos, Colman después, y entre ellos, apenas veían que uno de estos veloces picaba al hueco, ahí depositaban la pelota. Se nota que está todo hablado, se nota que hay una organización y una idea de juego.

En cuanto a lo defensivo el equipo cometió muchas faltas. Se vieron falencias graves en los pases largos de Yeimar Gómez, algunas distracciones de Elías Gómez y varias faltas de Musto. Los mejores en la defensa fueron Salazar y Pablo Álvarez, se mantuvieron sin errores graves y sin cometer infracciones innecesarias. 

En lo que respecta a Santiago García, empezó un tanto inseguro con los pies, dificultades para despejar con la pelota en movimiento y para sacar con el balón detenido. En el gol no tuvo responsabilidad pero no dejó una imagen de seguridad ante la falta de Mauricio Caranta.