Godoy Cruz se esforzó y logró mantener entre sus filas a Jaime Ayoví, delantero clave para Daniel Oldrá y de vital importancia en el equipo, ya que el torneo pasado fue el goleador del equipo y se espera que este campeonato vuelva a repetir sus buenas actuaciones y convierta una gran cantidad de goles que guíen al equipo hacia lo alto de la tabla.

El semestre pasado el Tomba sufrió constantemente en la defensa, pero disfrutó en el ataque, ya que tuvo a La Yoya como máximo goleador y también como gran socio en el ataque de Rubén Ramírez. El ecuatoriano fue el máximo goleador del equipo con 9 tantos en 11 partidos, logrando así un espectacular promedio.

En los partidos de Godoy Cruz se hizo costumbre ver el baile y festejo de Ayoví cada vez que convertía un gol, y con ese baile se despertaba la alegría de todos los hinchas bodegueros, que confiaron en el ecuatoriano y disfrutaron todos sus goles. En cada gol se desplegaba una fiesta en la hinchada tombina, que festejaba al compás de La Yoya.

El deseo del jugador siempre estuvo claro, y era continuar en Godoy Cruz, ya que en Mendoza siempre se sintió cómodo y encontró su lugar para demostrar lo que mejor sabe hacer: convertir goles y jugar al fútbol. Este deseo del jugador fue clave para su continuidad, ya que el delantero quiere llegar a su máximo nivel para ser tenido en cuenta de cara a la Copa América, que se disputará en Chile a mitad de año.

Así es como durante todo el verano estuvo el ida y vuelta y las dudas sobre su continuidad en el Tomba, hasta que finalmente se llegó a un acuerdo con final feliz y Ayoví volvió a Mendoza y seguirá regalando sus goles por un año más para el delirio y alegría de todos los hinchas bodegueros.

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Sobre el autor
Santiago Tagua
Comunicación Social. Amante del Periodismo y el deporte. Mendoza