Menos de dos meses pasaron desde aquel 14 de diciembre cuando Diego Milito levantó el trofeo que consagraba a Racing campeón después de 13 años y hoy en el club de Avellaneda se goza un clima de tranquilidad por haber obtenido un objetivo tan importante. Sin embargo, la euforia por haber logrado el título pasó y ahora el equipo de Diego Cocca tiene que pensar en lo que viene. Nuevos desafíos, nuevas responsabilidades y una triple competencia exigente que tiene incluida nada menos que la Copa Libertadores. Pasaron dos meses, hubo cambios que no serán fáciles de engranar y por eso es el momento de que el actual campeón defienda lo suyo y demuestre que como dijo su entrenador “El equipo todavía no tocó techo”.
Tras consagrarse en el torneo local, Racing disfrutó de un verano casi perfecto. Ganó jugando bien los tres compromisos que disputó en Mar del Plata, uno de ellos ante Independiente y demostró que el equipo sigue sólido en todas sus líneas. El único traspié fue en el amistoso ante San Martín de San Juan donde un equipo alternativo con la presentación de algunas incorporaciones cayó por penales tras igualar sin goles.
A priori parece una pretemporada ideal para el equipo campeón, pero no todo sigue igual en La Academia desde aquel 14 de diciembre del año pasado. A Cocca le tocaron piezas importantes y la preocupación del DT por la triple competencia tiene sus fundamentos. La salida de Ricardo Centurión fue un golpe duro para el técnico que además no parece estar conforme con la cantidad de refuerzos para afrontar los difíciles desafíos que Racing tiene por delante. Si bien las declaraciones del presidente Víctor Blanco son de suma tranquilidad por haber mantenido la base del plantel, lo cierto es que a falta de pocos días para el inicio del torneo y a una semana del debut en la copa, Racing cuenta con falencias en el recambio y el entrenador lejos de estar a gusto con lo incorporado hasta el momento asegura que el equipo está atrasado respecto de sus competidores.
El tiempo para ponerse a punto es muy acotado y si bien el cuerpo técnico sueña con la llegada de un delantero de jerarquía, la realidad es que por ahora no fue un mercado de pases exitoso para el último campeón del fútbol argentino. Se viene la hora de la verdad, en Racing hay mucha expectativa y más allá de las variantes del equipo y las pocas incorporaciones, en Avellaneda hay un clima de optimismo a la hora de pensar en el futuro próximo. Con lo bueno y con lo malo, hoy por hoy La Academia vive un buen presente y de la mano de Diego Milito, Racing piensa en positivo.
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