Miguel Russo estuvo a cargo de la dirección técnica de Rosario Central desde junio de 2012 a diciembre de 2014, dos años y medio. En ese período ascendió, ganó los 3 clásicos, obtuvo una cierta cantidad de puntos que brindaron tranquilidad para la permanencia, clasificó a la Copa Sudamericana y llegó a una final, pero todo eso que logró el equipo lo hizo 'sin jugar a nada'

El pelotazo a Abreu pareció ser la forma más utilizada por el anterior director técnico, y eso es lo que tiene que cambiar Coudet, tiene que trabajar una forma, un estilo constante, que perdure, que sea claro, que se note a lo que juega Central. Buscar con un pelotazo aéreo a un delantero puede ser una forma de juego que se utilice en los últimos minutos para tratar de ganar un partido, pero no la alternativa principal.

Cuando veíamos a Central dentro del campo en el Torneo de Transición daba la sensación que en la semana no se había trabajado, no había combinación de toques, ni jugadas para un tiro libre o de esquina, los defensores perdían la marca fácilmente, a los Canallas les costaba mucho llegar a situación de gol pero los rivales se las generaban sin problemas. 

En síntesis, el equipo de Coudet tiene que ser sólido defensivamente, tiene que trabajar el desmarque en la zona de creación de juego que es de mitad de cancha hacia adelante, tiene que tener un asignado para habilitar a los delanteros, otro para correr por la banda y desbordar, otro para hacer goles, tiene que demostrar una organización, trabajar y desarrollar la pelota parada tanto en ataque como en defensa, tiene que crear una estructura de equipo y una identidad de juego, como puede ser la agresividad y la presión que destacó varias veces el entrenador.

Si el equipo logra lo descripto en el párrafo anterior, entre otras cosas, van a ser más las alegrías que las derrotas, porque los grandes equipos que logran campeonatos, siempre tienen una o varias formas de juego que las utilizan dependiendo de la situación.