"Ese Burrito, no es un Burrito cualquiera, es jujeño y tiene nombre: el se llama Ariel Ortega", dice la letra de una canción que compuso el Grupo Ternura en homenaje al último gran ídolo que dio el Club Atlético River Plate. Ese Burrito, que debutó en River ante Platense, el 14 de diciembre de 1991, con tan solo 17 años. Desde ese momento el amor recíproco que hubo entre el jujeño y el pueblo millonario fue creciendo cada vez más.

Hoy a en su cumpleaños número 41, en forma de homenaje, repasamos su rica historia dentro del fútbol. Un jugador querido por todos los amantes del fútbol, fue alguien que trascendió las camisetas de los equipos, ya que además de ser un emblema de la Banda, fue por muchos años el 10 de la Selección Argentina y un ejemplo del potrero argentino.

Ortega empezó su carrera de la mano de Daniel Passarella, el técnico que lo hizo debutar en Primera y con el que ganó sus primeros títulos con la camiseta de River. Este buen desempeño en el club, lo catapultaron a la Selección Argentina dirigida en ese entonces por Alfio Basile, técnico que lo convocó para disputar, nada más ni nada menos que el Mundial de Estados Unidos 1994. En dicho torneo, ingresó en lugar de Diego Armando Maradona, en el partido que Argentina le ganó por 4 a 0 a Grecia, y debutó en un Mundial con tan solo 19 años.

De ahi en más sería un habitual jugador de la albiceleste, ya que luego del Mundial '94 el técnico de la Selección fue Daniel Passarella, quien lo hizo debutar en Primera. El Burrito partició en 3 mundiales (EE.UU. '94, Francia '98 y Corea-Japón 2002) y disputó 87 partidos en donde marcó en 16 oportunidades. Logró ganar la medalla de Oro en los Juegos Panamericanos del '95 y trajo la medalla de Plata en los JJ.OO. de Atlanta 1996.

Sus logros en River a traves del tiempo fueron incrementando, como así su idolatría crecía cada vez más. Con La Banda logró 7 títulos (Torneo Apertura '91,'93,'94 y 2004; Torneo Clausura 2002, '08 y Copa Libertadores 1996), y disputó 349 partidos en sus cuatro etapas en el club ('91-'96; '02; '06-'08 y '09-'10) en donde marcó 77 goles, entre ellos 3 tantos al rival de toda la vida.

Además de su intensa trayectoria por River, el Burrito también pasó por Europa en donde se codeó con los grandes del mundo, aunque sin éxito, debido a que no pudo acostumbrarse a la vida que se llevaba en el Viejo Continente. Pasó por equipos como Valencia, en donde compartió equipo con jugadores como Romario. Además de sus pasos por Parma (en donde ganó una Supercopa de Italia) y Sampdoria, y además de su recordado paso por el fútbol turco, en el Fenerbahce.

"Agradezco a Dios por haberme hecho hincha de River"

En el Millonario fue siempre bien recibido por sus hinchas, ya que siempre en donde estuvo, demostró sus ganas de volver a vestir la camiseta de River. Y así lo hizo, siempre que pudo volvió y esas ganas que demostró afuera de la cancha, las confirmaba adentro. En el verde césped, ahi donde más se lo disfrutó y se lo aplaudió. Su amor por River será siempre recordado, sobre todo por estar presente y dar la cara en uno de los momentos más difíciles de la historia riverplatense, en donde él fue el único héroe en ese lío.

Pasarán los años, y la camiseta 10 de River lo tendrá siempre como a uno de los que mejor la interpretó. En 2013 tuvo su merecida despedida en un Estadio Monumental repleto, en donde emocionó a todos los hinchas millonarios cuandó dijo: "Agradezco a Dios por haberme hecho hincha de River".

En el presente, a sus 41 años, no se lo volverá a ver dentro del campo de juego, pero en donde esté será un emblema viviente en Núñez, y será querido por todos aquellos que les guste realmente el fútbol. Hasta el final de nuestras vidas, Ariel.