Con la salida de Silvio Romero en este comienzo de año, Santiago Silva quedó como único punta referente de área. El delantero había sido buscado por Racing, pero Lanús decidió no cederlo ya que, de hacerlo, hubiera perdido a su máxima esperanza de gol. Hoy el presente le juega una mala pasada.

Tras el arranque errático del “tanque”, Guillermo Barros Schelotto decidió no utilizarlo en el encuentro frente a Arsenal (pese a haber estado en la lista de concentrados y ni siquiera ir al banco), cosa que no cayó muy bien en el entorno del uruguayo. Y para agravar la situación, en el entrenamiento formal de fútbol en la semana, Silva jugó para los suplentes, lo que le llevo a una discusión con el profesor Valdecantos (desmentida por el propio Director Técnico), a no ser parte del equipo el pasado fin de semana, y a no presentarse al entrenamiento del día martes. Lo que desencadenó en la rápida decisión, de parte del club, de suspenderlo por un mes sin goce de sueldo.

Con este panorama, y la ausencia repetida del tanque al entrenamiento del miercoles, Martín Guastadisegno, su representante, salió a dar por finalizada la etapa del delantero en Lanus: “La vida de Santiago Silva acá está terminada”.

El jueves se va a firmar la recisión de contrato, sin resarcimiento económico para el uruguayo, que ya recibió el guiño de Julio Cesar Falcioni que se ilusiona con abrochar a su delantero preferido (lo tuvo en Banfield y en Boca). Quilmes puede sumar un nuevo jugador gracias a la lesión de Cáseres.

Lanús, por otra parte piensa en sumar a Alan Ruiz (San Lorenzo), gracias al cupo que se abrió por la baja de Braghieri. Días cruciales para los Mellizos.