En un partido clave del Grupo 6 de la Copa Libertadores, se enfrentarpon en el estadio Elías Guerrero de la ciudad peruana de Chiclayo el anfitrión, Juan Aurich, frente a River Plate, que necesitaba imperiosamente una victoria.

A los 15 segundos Luis Tejada intentó sorprender de lejos, y Marcelo Barovero atajó en dos tiempos, lo que fue el primer parámetro de cómo estaba la cancha.

A los 7 minutos, un zurdazo de Leonardo Pisculichi, con parábola, casi se mete en el ángulo. En un partido con mucha presión y en un campo de juego por de más lllamativo por superficie y dimensiones, los arguemntos ofensivos invitaban a los remates de media distancia.

River apretaba el acelerador y a los 10´, en un pique fortuito, casi factura Rodrigo Mora, pero Pedro Gallese salió y detuvo el remate de la Pulga. La cancha jugaba en contra de los dos, pero el local lo padecía más, con errores defensivos y cediéndole espacios al Millonario para salir del fondo y contando con pelotas paradas.

El Millo dominaba el encuentro, y a los 21´un centro de Pisculichi cayó en la cabeza de Jonathan Maidana, que se la cedió a Eder Álvarez Balanta, que en el área chica y con absoluta soledad, de cabeza infló la red y decretó la apertura del marcador. Justamente Balanta, que pedía pista, fue confirmado como titular a último momento en lugar de Ramiro Funes Mori.

El equipo peruano, con al necesidad de ir a buscarlo, no tenía recursos para hacerlo, más allá de las ganas de Céspedes, mientras que River, con muchas dificultades de salir jugando por abajo, continuaba con su hegemonía dentro de la cancha, a pesar de que el esférico vivía por los aires y el pique era impredecible.

A los 39´ lo tuvo de nuevo el visitante, con un recupero de Mora por derecha, pase atrás y remate de Ariel Rojas, atajada por el arquero peruano. El partido no ofrecía demasiadas emociones, pero River en cualquier momento podía aumentar el marcador. De Juan Aurich solo se rescataba una chilena de Tejada por encima del travesaño.

La Banda tuvo dos chances muy nítidad de convertir antes del entreteimpo, atacando con ventaja numérica, peor las dilapidó, chocando con el fantasma de los cotejos anteriores, donde el equipo de Marcelo Gallardo, por no calibrar la puntería, terminó regalando puntos.

En el complemento, la primera de riesgo también fue de Aurich, por medio de Tejada, que se iba mano a mano pero por no poder controlar la pelota no llegó a patear.

Al Millo le costaba hacer pie en el segundo tiempo, cediéndole la posesión al local, que obligado por las circunstacias fue a jugar a campo contrario. De todos modos, Piscu tuvo el gol en su zurda, pero Gallese la sacó al córner.

A los 20´ST probó de lejos Sánchez, El partido era trabado, se dividían la pelota y carecía de dominador. El Ciclón Rojo solo apostaba de pelotas paradas, hasta que a los 21´ una jugada extraña: jugada en ataque de River, una clara infracción a Pisuclichi en el área que el árbitro omitió y en la réplica, Rengifo, recién ingresado, empató el encuentro. Sin proponérselo, el partido estaba como al principio.

El Millonario, con ese baldazo de agua fría, salió de nuevo a buscar el gol y en una jugada combinada entre Balanta y Rojas derivó en la entrada del Chino al área, que pateó apenas desviado.

Cerca del último cuarto de hora el Muñeco apostó por las entradas de Camilo Mayada y Gonzalo Martínez para ir a buscar el triunfo, para lograr el desequlibrio y lograr conectar el último toque.

Con nervios, los de Núñez iban al ataque, y Fernando Cavenaghi, que entró por Sánchez, tuvo una chance clara tras una filtrada de Mayada. Juan Aurich apostaba únicamente a rechazar para arriba. El local se salió con la suya y fue final, 1-1, en Chiclayo.

River continúa último en el Grupo 6, con dos puntos, pero le quedan dos partidos más de local. Sin embargo, su ineficacia a la hora de cerrar los partidos les está costando caro, y si no quiere una eliminación prematura debe dar cátedra de efectividad. No queda más margen de error.

Los goles del partido: