El estadio de boca es mítico por muchas cosas. Esas tribunas que laten, como tan fervientemente aseguran quienes las habitan, hacen temblar a cualquiera. Este domingo, albergará, una vez más, una nueva edición del Superclásico del fútbol argentino. Por eso, desde la dirigencia quieren tener todo en orden. Boca, la Bombonera y un método particular.

En 2010, las condiciones climáticas dijeron basta y un Boca- River tuvo que ser suspendido. El árbitro aquella vez fue Héctor Baldassi. Cuando se reanudó el juego, días más tarde, los locales vencieron a sus rivales por dos a cero, con tantos del chileno Medel.

El fin de semana- largo- que hace de antesala al clásico, nos recibió con un tiempo un tanto gris y por eso, desde los altos mandos del club, se dictaminó cubrir el campo de juego para preservar el estado del terreno. En la foto, se puede apreciar el uso de lonas para hacer prevención sobre el verde césped.

El terreno está, los cuidados también. No tienen excusa ni Boca ni River para dar un excelente espectáculo deportivo.