Los goles vinieron desde la delantera argentina que si bien perdonó muchas situaciones, golpeó en los momentos justos para sentenciar una imponente goleada ante el conjunto boliviano. A los 24 del primer tiempo, Di María abrió el marcador para la Albiceleste. Agüero profundizó la victoria parcial con dos goles, uno de penal y otro tras un centro del ex Rosario Central. El complemento trajo dos nuevos festejos para los argentinos, el Kun recién comenzada la segunda parte y posteriormente Angelito de Penal cerraron el 5-0 definitivamente.
Es complicado hacer un análisis cuando el partido se disputa ante un seleccionado infinitamente menor como el que se presentó hoy a disputar el encuentro en San Juan. Si recordar que estos partidos hubo un tiempo en el que los sufríamos con estos rivales menores e incluso hasta penamos empates increíbles. Lo de hoy fue todo lo contrario. Argentina se mostró superior del minuto 1 hasta el fin del partido, haciendo pesar su calidad individual a cada instante.
Cuando el partido cayó en el pozo que suelen caer esos encuentros que se definen de manera temprana, el director técnico argentino Gerardo Martino les dio minutos a Martín Demichelis, Erik Lamela, Gonzalo Higuaín y Milton Casco, mientras que el arquero Nahuel Guzmán había entrado en el entre tiempo por Sergio Romero. Para la curiosidad quedó que, con muchos jugadores tocados y en la final de la Champions, cuando Ángel Di María debió salir por un golpe del campo de juego, Argentina ya no tenía cambios y debió jugar la mitad del complemento con un jugador menos.
Ya no hay más tiempo de ensayos. Las cartas están sobre la mesa y solo resta que las figuras argentinas vuelvan tras jugar la final de la máxima competición europea. La selección demostró jerarquía aun sin su máxima figura Lionel Messi además de grandes jugadores como Carlos Tevez, Javier Mascherano y Roberto Pereyra. La ilusión está en lo más alto, hay un gran desafío por delante pero con un plantel más que capaz de lograr lo que se proponga.