Rara, desolada, olvidada. Así quedó La Serena luego de la partida de la Selección Argentina a Viña del Mar. La ciudad balnearia tenía un gran caudal de gente producto de la presencia nacional, pero ahora presenta un marco normal al que cualquier año sin un mega evento internacional.

Mientras tanto Viña del Mar, la tierra del festival chileno más importante en términos artísticos, se tiño de albiceleste. Los del Tata arribaron en las primeras horas para ubicarse, descansar y seguir pensando en Jamaica, el próximo compromiso para el elenco en la Copa América. De cara al duelo que protagonizarán ante los centroamericanos y luego de un almuerzo relajado, Argentina se entrenó en busca de encontrar la forma ideal para cerrar de la mejor manera su paso por el Grupo B.

El entrenamiento contó con un torneo de fútbol-tenis para mantener el clima distendido, no exigir al físico tras el viaje y realizar tareas de precisión combinadas con movimiento. De esta manera, las incógnitas en cuanto al 11 que vestirá la camiseta tradicional persisten.

Sin embargo, apareció una certeza: Agüero tiene una lesión leve en su hombro y requiere algunos días de recuperación por lo que probablemente no juegue ante el elenco jamaiquino. Teniendo en cuenta los resultados del próximo rival y como están las posibilidades, además de estar a la espera del fútbol formal del viernes, Martino no vería con malos ojos evitar que jueguen aquellos que están más exigidos físicamente junto a los que están con compromiso de tarjetas.

Sabiendo que en el banco hay jugadores de menor, pero gran calibre las variantes empiezan a dilucidarse. Romero seguirá en el arco para mantener el ritmo. Zabaleta y Garay integrarían la última zaga, mientras que Otamendi y Rojo cederían sus puestos para evitar una tarjeta que los margine de cuartos. En el medio el exigido nada más y nada menos sería Mascherano. Sin Gago, Banega acompañaría a Biglia mientras que Pastore probablemente persista de enlace.

Por los delanteros son varios nombres para tres puestos. Sin Agüero, se abre un lugar para que Higuaín tenga un espacio en el medio. En la derecha seguiría Messi, quien tuvo junto a Masche la temporada más exigente de los 23, porque el equipo gira en gran parte en torno a él. El que podría ceder su puesto sería Di María, quien no tuvo los mejores rendimientos lo que le permite soñar a Tevez.

Nuevamente, son muchas incógnitas y pocas certezas. Habrá que esperar al entrenamiento del viernes.