Boca terminó el primer semestre del año inmerso en un mar de dudas. Sin embargo, en la reanudación del torneo, el Xeneize sacó provecho de la igualdad de Unión y San Lorenzo en Santa Fe y se subió a la cima del torneo. La ilusión del hincha es cada vez más grande, a la espera de la presentación de Carlos Tevez, el conjunto de Rodolfo Arruabarrena venció, en Junín, a Sarmiento por la mínima diferencia con un tanto de Sebastián Palacios, tras una magnífica asistencia de Pablo Pérez. Aunque no mostró su mejor versión, el equipo de la Ribera tuvo las mejores chances y las aprovechó para mirar a todos desde arriba.
La primera llegada del encuentro fue del equipo local con un centro arco que exigió a Agustín Orion poco después de los cinco minutos de juego. La respuesta de Boca no se hizo esperar y, con una buena jugada preparada que culminó con un cabezazo exigido de Jonathan Calleri, los del Vasco Arruabarrena pusieron en peligro el arco defendido por César Rigamonti. Sin embargo, sería el Xeneize el que seguiría teniendo las oportunidades más claras. Con un Pérez inspirado, que jugó e hizo jugar, el conjunto visitante era una amenaza constante. Precisamente, el ex Newell's se vistió de Juan Román Riquelme para habilitar a Palacios, que le ganó las espaldas a la última línea y abrió el marcador.
El local no se quedaría conforme con el resultado e iría en busca de la igualdad. Pero sus llegadas eran tibias, aunque exigían una buena respuesta del arquero xeneize. Nicolás Sánchez sacó dos remates que, si no fuera por Orion y la falta de precisión a la hora de definir, pudieron haber cambiado la historia. Sobre el final del primer tiempo, los dirigidos por Sergio Lippi se adueñaron de la posesión del balón, aunque les faltó ese puntazo final para hacer sufrir a los de Arruabarrena.
En el complemento, la historia no cambiaría demasiado. Boca seguía errando en los metros finales, aunque ya no contaba con tantas situaciones, y Sarmiento continuaba buscando la igualdad, aún sin profundidad. El partido se volvió chato y aburrido. Sin embargo, los de Lippi llevaron al visitante contra las cuerdas a fuerza de orgullo y amor propio, aunque con pocas ideas futbolísticas que sustentaran sus intenciones. Un tiro libre de Sebastián Luna a las manos de Orion y un centro de Gino Peruzzi, que Calleri no llegó a empujar fueron las chances más emocionantes de la segunda parte.
Sobre el final, Boca se durmió la siesta en el último tiro libre de Sarmiento y llegó la jugada de la polémica. Todo el estadio reclamó penal de Marcelo Meli sobre Héctor Cuevas. Pero Federico Beligoy hizo oídos sordos al pedido de la gente y finalizó el encuentro.
Fue un partido cerrado, que Boca tuvo controlado, pero que no supo cerrar a tiempo y lo terminó sufriendo. A Sarmiento le faltó juego y creatividad para poder llevar sus intenciones un paso más adelante y, de esa forma, generarle peligro a su rival.
Este resultado deja a Sarmiento en la 19º posición, con 18 puntos, junto a Vélez, Temperley y Colón. Mientras tanto Boca se convirtió en el único líder del torneo con 34 unidades. Muy cerca se encuentra San Lorenzo, a solo un punto. Es por eso que el Xeneize no puede darse el lujo de dormir una siesta como la de la última jugada del partido, ya que le puede costar muy caro en su búsqueda por el título.