Pasión, efervescencia, expectativa pura se vivía en las horas previas de este día que parecía no iba a llegar más. El momento había llegado, los partidos previos habían sido levemente negativos ya que La Banda perdió 1 y empató los 2 restantes. El hincha de River, empezó a confiar después de mucho tiempo en un entrenador, y por eso colmó el estadio Monumental y alentó al equipo a pesar del pobre primer tiempo empleado ante los paraguayos.

Pocos niveles se pudieron rescatar en la primera etapa. Ponzio y Kranevitter, sí el Colo, estuvieron imprecisos. Delanteros que no se encontraron en ningún momento y González y Sánchez no gravitaron como lo debían hacer. Mercado, Vangioni y Maidana fueron los referentes del empuje del Millo en la remontada en la etapa complementaria.

Jonatan Maidana, a lo mejor no es valorado como se debería hacer, pero aquí en éste humilde lugar prevaleceremos la actitud, voluntad y garra de Jony a la hora de defender. Cortó, jugó y básicamente hizo todo el trabajo sucio que debe hacer un dos de equipo grande.

El jugador más temido y a tener en cuenta del conjunto paraguayo, era sin dudas Rodrigo Santander, quien fue bloqueado de manera aplastante por Maidana quien le ganó por abajo, por arriba y por los costados. Lo sacó a pasear, diciéndolo vulgarmente.

Un grande de verdad. Experiencia, y actitud copera. Igual que Ponzio, quien es fundamental cuando se debe afrontar los partidos más complicados, aunque en la noche del día de ayer fue opacado por el mediocampo de Guaraní.

Maidana, cuando todos iban al ataque, laterales, mediocampistas y el resto, pasaban mitad de cancha y los únicos que quedaban en la retaguardia eran él y Funes Mori. Dos patrones, que obligaron y castigaron a quienes intentaron llegar al área de Barovero.

Jonatan, en éste partido a sido nombrado como figura por Vavel. Garra, voluntad, relevamientos y autoridad.

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