Tras unos altibajos en el partido de ida ante Guaraní de Paraguay, Matías Kranevitter fue la figura del Millonario en la noche de copa y resultó imprescindible para que River distribuya su juego en el cancha.

El volante central fue clave para la clasificación a la final, no sólo por la estupenda actuación en este partido, si no también por las brindadas en los duelos a lo largo de la Copa.

Una vez más, el Colo demostró su entrega, actitud y garra. Fiel a su costumbre, dejó la vida en cada pelota. Fue preciso en los pases y la distribución del juego y vital en la marca. También cortó los avances de los paraguayos y fue esencial en la recuperación, todo esto sin Leonardo Ponzio (supendido), su complemento ideal como doble cinco (estuvo Lucho González, con altibajos).

Al finalizar el partido, el jugador declaró: "Es un resultado muy importante, porque fue un partido duro. Estuvimos muy concentrados y sabíamos que nosotros con la pelota podíamos hacer la diferencia. Lo importante es que estamos en la final, es algo histórico".

Sin embargo, cabe destacar que River tuvo varios puntos altos esta noche, entre ellos se destacó el Pity Martínez -con un gran despliegue en el primer tiempo-, Jonatan Maidana -impasable en el fondo-, Lucas Alario -el goleador de la noche- y Tabaré Viudéz -flamante refuerzo de Gallardo, asistidor del gol de Alario. Un equipo sólido en todas las líneas, con los refuerzos que responden y River, en el lugar de privilegio en América: la final de la Libertadores.