Los goleadores tienen rachas. Pueden pasar de ser figura y convertir todos los fines de semana a una sequía. Esto le sucede a Carlos Luna, que si bien es el máximo artillero del equipo en el campeonato (con seis goles), desde su doblete a Aldosivi en la fecha 15 (antes del receso) que no puede marcar. Hace siete partidos que el Chino está con la pólvora mojada y el equipo lo siente.

Ayer, una vez consumada la derrota por 1-0 ante Belgrano, el cordobés habló ante Fútbol Para Todos y se refirió a la jugada más clara para el Matador, con el encuentro sin goles: "Me quedó una clara, la quise levantar al primer palo, no sé que pasó. La agarré mal, le saquela vista a la pelota, estaba mirando a Olave, no la pude levantar".

Por otra parte, el oriundo de Piquillín lamentó el hecho de no convertir y que terminen los partidos con las manos vacías, sumando la tercera derrota en fila: "Lamentablemnete venimos sin meter las situaciones que nos quedan, es contradictorio de venir haciendo los últimos mejores tres partidos desde que volvimos a jugar y no podemos ganar, de hecho perdemos, que para nosotros no nos sirve de nada".

De todos modos, rconoció la gran tarea de Juan Carlos Olave, el arquero del Pirata y una de las figuras del encuentro: "Nos habimos comprometido ganar este partido partido, no pudimos. Él (por Olave) encontó las más claras, la de Pato (Galmarini) al final y la mía. Es triste. Hay que levantar cabeza y volver a ser el equipo que fuimos".

Para concluir, el Chino reconoció el mal momento individual y grupal pero está confiado en superar este mal trago y regresar a los primeros planos: "Veníamos con paso firme, pero caímos en un pozo. Hay que ser profesional, esto puede pasar, es fútbol, como nos gustan las buenas hay que bancarse las malas y mirar para adelante, otra no queda".