River llega más favorito que Boca de cara al Superclásico

El equipo del Muñeco llega con el ánimo en alza luego de la victoria ante Chicago por 4 a 1. Además, el Millonario conquistó cuatro títulos internacionales en el último año y se hizo fuerte en los duelos ante el Xeneize, que buscará dar vuelta el trago amargo sufrido ante San Lorenzo.

River llega más favorito que Boca de cara al Superclásico
El equipo del Muñeco Gallardo viene pisando fuerte en los Superclásicos.
alejandropotenza
Por Alejandro Potenza

Se viene el Superclásico. La ansiedad juega en contra de los hinchas. El partido más esperado del fútbol argentino tendrá su cuarta versión, de manera oficial, en lo que va del 2015. Marcelo Gallardo y Rodolfo Arruabarrena, otra vez cara a cara, buscarán salir victoriosos en un duelo que promete ser intenso por el presente de los dos clubes más importantes de la Argentina.

En este año, el primer enfrentamiento se dio en mayo, por la fecha 11 del torneo local y con ambos equipos como líderes del certamen. Y el que sonrió fue Boca. Cuatro días después, River se cobró revancha y ganó el primer chico de la Libertadores. En el encuentro de vuelta, el marcador no vio goles en 45 minutos de juego y el partido terminó suspendido, por el famoso incidente del gas pimienta. En el cuarto enfrentamiento, y para no perder la costumbre, hay mucho en juego para ambos equipos. El que consiga la victoria va a encontrar un impulso anímico importante y va a pisar fuerte en la tabla de posiciones.

El que mejor llega a este trascendental encuentro es River. El equipo del Muñeco Gallardo está pasando por un momento único, que se hace evidente cuando uno repasa los títulos recientes. El Millonario viene de ser campeón de la Copa Libertadores y de la Suruga Bank, a lo que hay que sumarle la Sudamericana del 2014 y la Recopa obtenida a principios de este año frente a San Lorenzo. A su vez, en los dos certamenes más importantes del continente, el conjunto de Nuñez se dio el lujo de dejar en el camino al Xeneize.

Si gana el domingo, el Millonario se prendería nuevamente en la lucha por el Campeonato. Pese a que luego de su estadía en Japón el equipo del Muñeco tuvo algunos traspiés en el torneo local, todo eso parece haber quedado en el olvido con la última victoria ante Nueva Chicago por 4 a 1 en Mataderos, con un triplete del cada vez más querido Lucas Alario. El exdelantero de Colón, que llegó al club para disputar las semifinales de la Libertadores, se dio el lujo de anotar el primer gol en la final ante Tigres y con sus buenas actuaciones se está ganando el cariño de la hinchada. Y del resto de los jugadores del equipo no hay mucho más por agregar. El plantel de River se está acostumbrando cada vez más a jugar partidos que son finales.

Por otro lado, Boca está necesitado de títulos. El hincha, los jugadores, el cuerpo técnico y el Presidente del club así lo reconocen. La sequía del Xeneize lleva tres años (el último festejo fue la Copa Argentina 2012) y saben que están ante la oportunidad de cortarla. Escolta de San Lorenzo en el torneo local y en cuartos de final de la Copa Argentina, el equipo del Vasco se posiciona firme en las peleas por ambos títulos y buscan sacarse la espina de no poder cumplir en los partidos importantes. Con el Vasco Arruabarrena como DT, el Xeneize solo ganó dos de los once encuentros ante los equipos grandes. Y el último traspié en este tipo de encuentros fue ante el Ciclón, en la fecha pasada, en un encuentro que parecía morir en el empate.

El plus que tiene Boca hoy en día es la vuelta de Carlos Tevez a la institución. El Xeneize se apoya en su ídolo para salir adelante y le entrega el mando futbolístico al jugador que volvió en plenitud desde la Juventus para retornar al club de sus amores. El Apache buscará rememorar la alegría del 2004, cuando en uno de sus últimos Superclásicos con la azul y oro enmudeció al Monumental con su gol y el recordado festejo de la Gallinita.

Todo está listo para disfrutar, el domingo a las 18:15, de una nueva edición del Superclásico. Cuando la pelota ruede, las palabras quedan de lado. Con mucho en juego, River y Boca buscarán escribir una nueva página de gloria en sus gloriosas historias.