Y, un día, se despertó Boca Juniors. Uno de los equipos más grandes del fútbol argentino, volvió a darle una alegría a la gente. De la mano de Carlos Tevez, quien retornó al club de sus amores a mediados de este año, el conjunto de la Ribera se consagró campeón del Torneo Julio Humberto Grondona y la Copa Argentina.
El conjunto de Rodolfo Arruabarrena tuvo un buen rendimiento a lo largo del año, con algunos altibajos. El parate por la Copa América fue vital para superar el mal trago de la Copa Libertadores. El torneo continental era uno de los grandes objetivos del combinado xeneize y la eliminación en los octavos de final a manos de River Plate (terminaría siendo el campeón) golpeó duro. Sin embargo, en la reanudación Boca se repuso y de la mano del Apache (Tevez) empezó a erigir su supremacía en el torneo.
Pero el Xeneize volvió a tropezar con uno de sus máximos perseguidores. En el Nuevo Gasómetro, San Lorenzo se quedaría con los tres puntos y la cima del torneo gracias al gol de Mauro Matos. Aunque, en una nueva muestra de carácter, en la fecha de los clásicos Boca aprovechó la caída del Ciclón y volvió a quedar puntero del torneo. A partir de allí, los del Vasco Arruabarrena no abandonaron la cima.
Además, la Copa Argentina tuvo a Boca Juniors como uno de los grandes animadores. Luego del triunfo trabajado sobre Huracán de Las Heras, el conjunto de la Ribera venció a Banfield, Guaraní Antonio Franco, Defensa y Justicia y Lanús; para llegar a la final del torneo nacional. Allí se vio las caras con Rosario Central (otro de los animadores del torneo local). En un partido polémico, el Xeneize se quedó con su segundo título en este 2015.
Luego de cuatro años sin obtener ningún título, el Xeneize mantuvo un buen nivel a lo largo del 2015 y pudo hacerse con ambos títulos; metiendo a su DT entre los ocho entrenadores que se consagraron campeones en el conjunto de la Ribera, tras haber sido campeón como jugador. Boca logró cortar la sequía y el hambre de gloria. Tras muchos tropiezos y una siesta de cuatro años, uno de los gigantes del fútbol argentino se puso de pie.