Dura caída para los de Gallardo. Comienzo del año, pretemporada desgastante, pero jugadores demasiado imprecisos para esta altura del año. Recién los primero 90 minutos de juego, es verdad, pero al ver que la única jugada colectiva a nivel ofensivo del Millo fue en el gol de Bertolo de rebote, el 3 a 2 definitivo, es preocupante.

River cayó ante Independiente en la ciudad que no fue feliz esta vez. El equipo de Avellaneda no le podía ganar en los torneos de verano a La Banda desde el año 2006.

El equipo de Gallardo dejó varias dudas y tan solo un puñado de garantías, tanto de nombres como de conceptos. A la hora de señalar futbolistas específicos se puede mencionar a Nicolás Domingo, que tuvo su regreso a River ésta noche y lo hizo de gran manera. Pases a primer toque, voracidad en la marca y sobre todo claridad a la hora de dar el balón.

Otro apellido que retumbó en la mente de Gallardo con aires de vuelta exitosa, especialmente en la primer etapa del partido, fue la de Eder Álvarez Balanta, que fue el responsable de cada salida del fondo por parte de River y además tuvo que tolerar la displicencia de un Casco que parece no aprender más. Por suerte para el fanático del Millo, hasta el momento, Vangioni se queda seis meses más en la entidad de Núñez.

A la hora de hablar del nivel colectivo no se puede mencionar una gran actuación por parte de los de Napoleón. Faltó fútbol, mucho fútbol, como en aquel 2015 que se salvó gracias a las individualidades, y el entrenador del Más Grande deberá pulir muchos aspectos de juego.

Lo único que se pudo rescatar, rasgar entre lo profundo de la negatividad que dejó la pálida actuación del Millo, es la presión constante del mediocampo comandado por Lucho y Domingo apoyado por Maidana y Balanta. Las falencias a la hora de buscar recuperar rápidamente el balón se vieron en el infaltable Casco, Martínez, Bertolo y Mayada.

Falta de compromiso por parte de algunos jugadores, condicionaron por ejemplo al zaguero central colombiano a salir constantemente al cruce por el sector izquierdo de River, ese vendito costado del campo de juego que desde la ida de Rojas no se vio lúcido y eficaz.

River deberá mejorar varios ítems para pensar en grande. La Banda tendrá múltiples competencias y necesitará de tener a todo su plantel en un buen rendimiento, y hoy un puñado de futbolistas dejaron mucho que desear. A levantar el nivel y mirar para los Superclásicos ante Boca.