En una linda tarde veraniega en Caballito, Talleres de Córdoba derrotó a Ferrocarril Oeste por 2 tantos contra 1 en encuentro perteneciente a la fecha 6. El conjunto dirigido por Frank Kudelka se impuso al verde luego de empezar perdiendo, debido a un penal bien cobrado por el árbitro Pedro Argañaraz. No obstante, la ‘‘joya’’ Solís y Strahman dieron vuelta el marcador para el equipo cordobés, que actualmente se encuentra como único puntero del campeonato con 16 unidades.

Ya metiéndonos en la primera mitad, el cotejo comenzó de menor a mayor en cuanto a la intensidad de juego, ya que tanto Talleres como Ferro no avanzaban demasiado al área rival. No obstante, los primeros despliegues en calidad ofensiva la dio el conjunto local a través de las subidas de Mazur y las ocasiones peligrosas generadas en los pies de Puglia. Fue así como el verde de Caballito consiguió una falta adentro del área y se hizo con el primer gol del partido, gracias a un penal ejecutado por Frontini.

No obstante, el gol de Ferro a los 12 minutos sirvió de ‘’baldazo de agua fría’’ para que el conjunto albiazul se despertara de su letargo futbolístico. El hecho de empezar perdiendo tuvo un efecto tal en los jugadores matadores, que en los minutos posteriores al gol local, buscaron incesantemente el empate a través de su poderoso triángulo ofensivo compuesto por Solís, Reynoso y Ramis.

Y fue así nomás, como a los 36 minutos Cháves desbordó por la banda derecha y le mandó un centro de pique a Solís, que desde el centro de la medialuna del área depositó un bombazo inatajable para el pobre Limounsín, que nada pudo hacer ante semejante remate. Éste era el empate transitorio y meritorio que obtenía el equipo ‘’tallarín’’ sobre el final de la primera parte.

En la segunda mitad, las cosas no serían muy diferentes ya que ambos buscarían el gol, pero la eficacia y el buen manejo de la circulación del balón favorecerían a Talleres. Esto se puede plasmar, con la posesión y presión que generó el equipo cordobés en cada ocasión de gol. Y los responsables de llevar esto a cabo seguían siendo los componentes del imparable triángulo ofensivo, sumado también a la labor fundamental de Jerez Silva. Todos ellos se volvieron imparables en el mediocampo y obligaban a la defensa local a despejar las pelotas de peligro al corner.

Hasta que luego de tanto insistir, a los 4 minutos de aquella segunda parte, Nazareno Solís asistió a Eial Strahman en corner excelentemente ejecutado, el cual con un cabezazo a lo ‘’Palermo’’ cambió por gol. Así la T, se ponía arriba en el marcador y cambiaba la historia del encuentro.

De allí en más, el conjunto cordobés pudo haber cerrado el partido en varios contragolpes mal finalizados. Mientras que Ferro, iba como podía en busca del empate. No obstante, los hilos del partido siempre terminaban siendo manejados por Talleres a través del mediocampo, gracias a la labor defensiva de Burgos y las subidas de Jerez Silva.

Fue así como el partido llegó a su fin y Talleres nuevamente cantó victoria ante un respetable rival. Mientras tanto, Kudelka sumó una victoria más y acrecentó su racha de partidos invictos. Entonces, ¿Podrá Talleres seguir con el mismo ritmo hasta el final de campeonato? Por el momento, el olor a ascenso y la ilusión es más latente que nunca en la masa albiazul. Solo en unos meses se sabrá si Córdoba volverá a recuperar su clásico en la máxima categoría del futbol argentino.