Otra derrota más. Otra derrota de esas que duelen. Tigre debía jugar el postergado frente a Huracán de la fecha dos del torneo doméstico. Debía volver a jugar en su estadio, una vez más, dejó a su gente con gusto a nada.
La cita se pactó para el día lunes a las 21 hs. El partido se suspendido debido al accidente que el Globo tuvo en tierras venezolanas. Y se creía que Tigre aprovecharía el envión anímico de la victoria, en su estadio, 5-0 ante Atlético Tucumán (recordemos que luego cayó 1-0 con San Martín en condición de visitante) pero aquel abultado triunfo tan sólo fue un espejismo en el penoso andar del Matador en el campeonato.
El partido comenzó parejo. Con un Lucas Janson inquieto y movedizo, tuvo la chance de ponerse arriba en el marcador, pero la mala fortuna o mala definición le ahogarían el grito a los de Victoria.
Pero a los 15 minutos, Daniel Montenegro, puso al Globo 1-0 arriba. En comparación con otros partidos, el Matador intentó buscar la igualdad. Con el orgullo herido fue en busca del gol. En ese trajín, Lucas Wilchez dejaba el campo de juego con una molestia. En su lugar ingresaría Jorge Rodríguez.
El Japo volvía al primer equipo, luego de no ser tenido muy en cuenta por el DT, una serie de lesiones, lo llevaron de nuevo al primer equipo. Rodríguez le respondió al DT con un muy buena actuación, el empate transitorio lo marcó justamente él, tras pase de Rincón. Con su ingreso, le dio mas ritmo al ataque Matador, e intentó ser el conductor. Por momentos, cumplió.
El segundo tiempo fue muy parecido al primero, pero esta vez a Tigre se le habían agotado las ideas. Encima sufriría otra baja más. Esta vez, Lucas Pittinari, el volante que ocasionalmente jugaba en la defensa, abandonó el campo de juego con una molestia, y en su lugar ingresó Santiago Izaguirre.
El segundo gol de Huracán llegó, por una desatención de la defensa y Mariano González sello el 2-1 final. Si bien Tigre intentó buscar el empate con más corazón que juego, los cambios realizados por el DT, no ayudaron demasiado en la búsqueda del empate.
Lo llamativo de la noche, fue cuando Kevin Itabel, de muy flojo partido, vio la roja por doble amarilla, la gran mayoría del publico presente aplaudió la actitud del árbitro. Insólito.
El Matador suma 5 puntos sobre 21 posibles, apenas una victoria y dos empates, con cuatro derrotas (dos en el Coliseo). Necesita con urgencia un resultado favorable y que las lesiones dejen de acechar Victoria. ¿Cómo queda Camoranesi?