Por izquierda y por derecha. Dentro del área y fuera de ella. Con remates de corta, media y larga distancia. Nada. La gran actuación de Guruceaga y la falta de suerte colaboraron para que el encuentro entre Huracán y Peñarol finalizara en cero.

Tras el partido, Eduardo Domínguez dialogó con la prensa y comentó sus sensaciones tras el encuentro.  "Me voy con tranquilidad porque el equipo dió todo" inició la conferencia.

El técnico ahondó en detalles para explicar cómo se dió el partido, según su visión. "Peñarol iba a hacer un juego aéreo y físico, y así fue hasta la expulsión. Con la expulsión nos pusimos nerviosos y queríamos terminar la jugada enseguida. En el segundo tiempo fuimos los protagonistas excluyentes del partido. Los últimos cinco Peñarol tuvo algunas contras pero sin concretar. Su arquero fue figura" dijo, cerrando su análisis.

En las tribunas, uno de los temas más comentados fue el pésimo estado del césped. Domínguez no hizo oídos sordos y mandó un mensaje para aquellos que se encargan de esa faceta: "El campo de juego nos jugó en contra: a veces necesitamos definir de primera y hoy costó".

El final del encuentro fue no apto para cardíacos: el Globo iba y se desprotegía atrás, dejandole la chance de una contra a los uruguayos. Montenegro marcó para el delirio de todo el Ducó, pero el lineman lo anuló por un supuesto offside de Ábila. En la contra, Marcos Díaz salvó al Globo enviando la pelota al córner; pero de ese envío, Gurucega marcó de cabeza, en un gol que hubiese entrado en todos los libros de historia. Sin embargo, el árbitro ecuatoriano no convalidó el gol por una falta de Affonso contra el portero quemero.

Eduardo Domínguez dió su versión sobre estos hechos, iniciando con una confesión pocas veces escuchada: "En la cancha creí que el gol de ellos había sido legítimo y el árbitro lo había cobrado para compensar". 

"No sé que cobra en el gol que nos anula" se descargó ,y añadió "Supuestamente es un offside pasivo, pero en el primer tiempo Murillo estaba en offside pasivo, fue a presionar a Nervo y no cobraron nada. Wanchope estaba por afuera del arco, no interfiere en la visión de Guruceaga: hasta el arquero se lamenta cuando la pelota entra".

Eduardo no coincidió con el criterio arbitral y aprovechó para recordar una jugada polémica que pasó desapercibida por la vorágine del final: "Siento que era un gol lejítimo. No sólo eso, también hubo un claro penal en el primer tiempo que no nos cobró".

A lo largo de la conferencia, Domínguez nunca perdió la calma pese a todo lo que denunció. Sobre el final, recuperó su tono cansino. "Hay que dar vuelta la página: iremos a clasificar a otro país. Queríamos hacerlo en casa, pero todavía sigue dependiendo de nosotros" dijo, iluminando de vuelta la esperanza de todo el pueblo quemero.